Trastornos del sueño
Mantenerse en actividad permanente puede convertirse con el tiempo en un desencadenante de estrés, ya que esto no solo genera que tu cuerpo se mantenga en un constante estado de alerta, sino que también tu mente empiece a verse afectada negativamente por ello. Esto hará que te resulte más difícil estructurar tus pensamientos. Al final, tu cuerpo y mente se sentirán acelerados a causa del estrés y terminarás sufriendo problemas asociados al trastorno del sueño.
Cabe destacar que al momento de hacer referencia al termino trastorno del sueño este incluye tanto la dificultad para conciliar el sueño como el problema de somnolencia.
Trastornos de la alimentación
Otro signo sutil del estrés que deberás tener en cuenta es aquel relacionado con los dolores estomacales o la sensación de tener un nudo en el estómago. Esto representa la manera en que tu cuerpo canaliza el estrés, generando sensibilidad en esa área.
Esta es una situación que puede derivar en una menor ingesta de comida a causa de la sensación desagradable experimentada al comer, producto de esa sensibilidad estomacal, incidiendo también en el proceso de digestión de los alimentos que consumes, los cuales, a causa del estrés, pueden tornarse difíciles de procesar por tu cuerpo.
Irritabilidad o irascibilidad
Reaccionar amablemente y mantener la calma pueden resultar acciones difíciles de realizar cuando se está sobrecargado de trabajo. En el momento que los síntomas del estrés se tornan intensos estos pueden ocasionar que termines alterándote y descargando tu frustración con tus seres queridos como consecuencia por no saber lidiar con la situación.
Si sientes que estas experimentando una o varias de las señales de estrés descritas en este post, entonces es tiempo de que tomes las acciones necesarias para erradicarlas y llevar tu salud a un mejor rumbo, a fin de que puedas recuperar la normalidad de tu rutina sin correr el riesgo de colapsar en tus emociones.