En caso de enfermedad, mirad primero la columna vertebral.Hipócrates, Padre de la Medicina moderna
Como bien sabemos por otras disciplinas holísticas, "el cuerpo es el escenario donde se representan nuestras emociones", la mayoría de ellas inconscientes y la columna representa “el camino o eje de vida” de la persona, por lo cual al liberarla y recuperar su equilibrio vemos profundas transformaciones a todos los niveles.
Técnica Estructural es un protocolo bioenergético que corrige, sin necesidad de manipular, las desviaciones de la columna vertebral, así como los bloqueos energéticos y emocionales que provocaron esa desviación, produciendo un profundo bienestar, recuperación del sistema físico, nervioso, energético, mental, emocional y espiritual.
A nivel físico ayuda a corregir la postura corporal, dolores de espalda, restablecer el equilibrio físico del cuerpo y el buen funcionamiento del sistema nervioso y mejora y ayuda en cualquier patología (al liberar la comunicación entre el sistema nervioso y las glándulas y órganos). Mejora la calidad del sueño y recuperación. Se puede utilizar, al no ser manipulativa, con personas con fibromialgia, artrosis, artritis...
A nivel mental y emocional favorece una gran armonía y sensación de paz, mayor equilibrio, templanza y serenidad ante los avatares de la vida, recuperando el equilibro entre mente y corazón y poder personal. Facilita una gran liberación de los patrones inconscientes (miedos, fobias, traumas, patrones transgeneracionales...), creencias limitantes (inconsciente colectivo, memorias heredadas...) sin necesidad de revivir, remover... ni contar nada al facilitador de la ténica. Produce una gran apertura de consciencia que nos ayuda a transformar nuestra experiencia de vida en sabiduría.
A nivel energético se va generando, al liberar los bloqueos y patrones que los generaron, una mayor vibración y fortaleza energética.
A nivel espiritual produce una gran “descarga del alma”, ayudándonos a liberarnos de lo que creemos ser (por toda la carga inconsciente, patrones heredados, memoria celular...), para poder SER lo que en verdad Somos, lo que llamamos por otras disciplinas espirituales, liberar el Camino de Vuelta a Casa. Favorece, mucho, la conexión con nuestra propia voz interior, nuestro guía interno.
Terapia Estructural es sumamente respetuosa con los tiempos de integración de cada persona y después de cada sesión se testa con kinesiología si la persona necesita otra sesión o no, cuándo... La media de sesiones son 4, no es un proceso largo.
Cada sesión se desarrolla en dos partes, con dos protocolos distintos, que se aprenden en 2 módulos:
Primera parte (se aprende en el primer módulo): corrección bioenergética, sin manipular, de las desviaciones de la columna vertebral.
Segunda parte (se aprende en el módulo 2): se trabaja el no-consciente, liberando los bloqueos emocionales y energéticos (bloqueos heredados, patrones familiares, fobias, miedos, duelos no concluidos, traumas)
Cuando realizas el módulo 1 se te asigna una persona que ha realizado el módulo 2 que te facilitará la parte energética/emocional, para que las personas a las que realices el protocolo desde el primer momento reciban la técnica completa.
Soy facilitador y formador de Terapia Estructural porque, después de tantos años de aprender, recibir y ofrecer distintas técnicas, no he encontrado ninguna, tan sencilla, armoniosa, amigable, liberadora... a todos los niveles, como he comentado, generando grandes, profundos y permanentes cambios en la persona y también en su vida. Eso es lo que yo mismo he experimentado porque ¡no puedo ofrecer nada que no haya probado en mí primero!
Nota: El artículo ha sido publicado originalmente en Saludterapia.