Una de las mayores barreras para el desarrollo de la personalidad en tiempos como los que vivimos, es la proliferación de complejos que no nos permiten mejorar nuestra capacidad de percepción de los asuntos en los que en realidad deberíamos concentrarnos y aumentar con ello nuestra autoestima. Así que desde este momento, comienza a olvidarte de ellos, a dejarlos atrás y empezar una nueva vida libre de prejuicios personales.
¿Qué son los COMPLEJOS?
Se los puede entender como percepciones distorsionadas o imágenes exageradas de uno mismo que se originan al compararnos con otras personas, o con modelos que la sociedad impone.
Desde el punto de vista médico:
Los psicólogos definen los complejos como las particularidades individuales producto de las experiencias, las vivencias y el tiempo, como parte de un todo global que define cierta actitud.
En palabras más corrientes, el termino hace referencia a aquellas situaciones por las que hemos pasado de vez en cuando, que nos hicieron creer que sería así para siempre.
Estos complejos pueden llegar a influir y condicionar la vida de quien los padece, incluso pueden impedir disfrutar de determinadas cosas o llegar a limitar.
Factores que influyen y acentúan un COMPLEJO
Uno de los factores que más influyen en la formación de un carácter acomplejado es el entorno familiar, la falta de apoyo y atención por parte de ellos hará que el niño crezca con una baja autoestima.
El entorno escolar es otro factor que influye enormemente. Cuando los niños tienen alguna característica física que sobresale puede convertirse en objeto de burlas de sus compañeros, quienes probablemente le pondrán algún apodo.
Otro factor a tener en cuenta es la sociedad, que marca modas y estereotipos de belleza que no se corresponde con la realidad. Esto hace que muchas personas se sientan acomplejadas al compararse con esos modelos que la sociedad impone.
¿Cómo más se explican?:
Se ha determinado que existe cierta relación entre ellos y los temperamentos obsesivos dados por determinadas etapas de la vida. Tal es el caso de la percepción de obesidad cuando en realidad no existe; o el pensar que se fracasará de forma consecutiva en una y otra relación, o el solo hecho de pensar que un cambio puede acabar con la estabilidad mental de alguien.
La explicación radica en la sensación de totalitarismo que nos brinda lo que no volvemos a experimentar y hay una buena referencia para ello: cuando vez un día soleado con una mañana colorida, no piensas que así va a ser mañana, o el día después de mañana, solo pensarás que es por hoy porque debes vivirlo habitualmente, eso nos salva de un complejo. Por ejemplo en este momento tenemos todos, el complejo de que el sol sale cada día ¿Qué pasaría si dejara de salir?
SOLUCIONES para personas acomplejadas
Los acomplejados son asediados por pensamientos irracionales sobre ellos mismos, generalmente sobre una característica física, que impiden disfrutar de la vida. Pero pueden superarse
Además pueden influir negativamente produciendo inseguridad y baja autoestima.
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Muchos de estos complejos se pueden acentuar en la adolescencia, ya que en esta etapa se producen grandes cambios físicos y la personalidad aún no está formada. Los adolescentes son más vulnerables y necesitan la aprobación de los demás para su propia autoestima.
¿Cómo superar los complejos?
Lo más importante para superar un complejo es aprender a quererse uno mismo, aceptándose y valorándose tal y como cada uno es, con sus virtudes y defectos.
Y entendiendo, ante todo, que uno vale por lo que es y por cómo es interiormente, no por su apariencia física. Hay que buscar aspectos positivos de la personalidad y repasar las virtudes y cualidades.
Se debe actuar de acuerdo a los propios valores sin tener que contentar o gustar a todo el mundo.
Hay que tratar de sacar lo mejor de sí y no autodespreciarse, considerando que con nuestros actos transmitimos lo que pensamos de nosotros mismos.
Definitivamente, la apariencia física es secundaria a cómo uno impacta como “persona completa”, priorizándose el estilo y el don de gente.
¿Cómo DESHACERNOS de los COMPLEJOS?
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Lo primero a saber, es que siempre será esencial contar con el apoyo de un profesional que pueda guiarte por el camino más seguro, ya que se trata de una condición mental, que aunque leve, debe ser tocada con suavidad para no ocasionar daños mayores. Mientras tanto, sírvete de estos consejos.
No somos perfectos
Es vital que ante todo comprendas que no eres y jamás podrás ser perfecto ante la sociedad, pero sí que puedes serlo para ti. No esperes la aprobación constante de todo lo que haces, mejor déjate llevar por tu personalidad y haz lo que mejor te parezca, siempre y cuando tus actitudes no afecten a nadie.
Haz un recuento de tus logros
Para que tu autoestima siempre esté en lo alto, trata de poner delante de ti lo que has podido lograr con tu trabajo, tu estudio, tus esfuerzos y disciplina. Los complejos muchas veces están fundados en cualidades de “no superación personal” que se acumulan con el tiempo al paso de los fracasos, y bien sabemos que es completamente normal equivocarnos y no ganar siempre, pero de seguro lo habrás hecho al menos un par de veces.
Comienza un curso corto y finalízalo
Esta recomendación está muy enlazada con la anterior y se trata de conseguir puntos para ti, demostrarte de vez en cuando que puedes finalizar algo de la mejor forma. Toma un curso corto incluso por internet sea de pago o no, certificado o no, lo ideal es que tengas disciplina para concluirlo con éxito, luego ve por uno más y verás como la dignidad de lo bien hecho se hace visible.
Hazte respetar
No tener músculos, o el peso ideal o el rostro perfecto, no es excusa para que nadie abuse de ti, te haga comentarios malintencionados o te rechace. A la primera muestra de violencia psicológica, apártate lo más que puedas y si es del caso, entabla una denuncia (hoy en día es muy sencillo hacerlo y te brindan las garantías necesarias), pero también es cierto que lo más importante es que ello no te afecte: para uno puedes no ser muy bell@, pero para otros no.
Acostúmbrate a las diferencias
Recuerda que nadie tiene porque ser igual a nadie, todos creamos personalidades diferentes y estas han de ser respetadas, obviamente cuidando de la salud mental (evitando los complejos).
Inténtalo de nuevo
Como te dijimos al principio, muchas de estas condiciones están dadas por no intentarlo nuevamente. Cuando creas que algo será por siempre de cierta manera, ¿Qué te cuesta volver a hacerlo?, ¿quizás se miras al espejo de otra forma, ya no seas tan?, ¿quizás si juegas futbol de nuevo te des cuenta de que no es malo? No te quedes con ninguna experiencia, por más temor que te dé algo, inténtalo de nuevo.