Este padecimiento se presenta como un dolor agudo con una duración de más o menos OCHO semanas en la mayoría de casos, es importante siempre la debida recomendación del especialista médico para iniciar el tratamiento clínico que corresponda para el pronto regreso a las actividades habituales.
El lumbago se caracteriza en 5 diferentes clases tales como:
Mecánico, como las lesiones musculares o de ligamentos o esguinces
Ciática o neurogénico, que se manifiestan generalmente en hernias del núcleo pulposo
Inflamatorio, por ejemplo en una espondiloartritis anquilosante
Ocasionado a causas sistémicas o neoplásicas tales como de metástasis espinales o tuberculosis de la columna
El psicogénico referido como una simulación de dolor lumbar en búsqueda de compensación económica o emocional.
Posibles tratamientos para alivianar el lumbago
Si el dolor de espalda viene afectando desde hace desde hace poco tiempo, seguramente una rutina de ejercicios no resuelva el inconveniente. De acuerdo a investigaciones, las terapias de ejercicios solo pueden brindar resultados favorables cuando la persona sufre de lumbalgia por un periodo de más de tres meses. En casos crónicos, lo más aconsejable es acudir a un especialista quien seguramente recomendara y guiara ejercicios de fortalecimiento y estiramiento lumbar.
Algunos ejercicios para tratar el lumbago
Acostado sobre una superficie plana, puede ser el suelo, colocado en posición boca arriba, mantén tus piernas completamente estiradas
Comenzaras a elevar una pierna y flexionarla mientras mantienes la otra pierna estirada y pegada al suelo
Lleva tu rodilla hasta la altura de pecho. Si el dolor es muy fuerte puedes colocar las manos detrás de la rodilla como apoyo
Ahora hacerlo de igual manera con la otra pierna.
Ejercicios para deportistas con lumbago
Para estos ejercicios deberás colocarte en la misma posición que los ejercicios anteriores salvo que las piernas no deben llegar a la extensión total. Es importante que en ambos ejercicios dirijas tu mentón hacia el pecho de forma ligera, con la finalidad de mantener el estiramiento de la curvatura cervical.
Colócate de espalda cruzando tu pierna derecha sobre la izquierda de manera en que dejes un espacio entre ambas piernas.
Coloca ambas manos por detrás de tu rodilla
Estira tu pierna izquierda hacia el pecho. Al momento que sientas que toda la musculatura del glúteo se estira, ya podrás hacerlo con la otra pierna
En posición de espaldas, eleva u cruza simultáneamente ambas piernas manteniéndolas bien cerradas.
Si soportas el dolor puedes tomarte de los pies ayudándote con ambas manos para tirar hacia tu cuerpo, esto estirara toda la zona lumbar.
Repetir todas las veces que sean necesarias para hacer que tu espalda baja entre en estado de relajación.
Otro ejercicios muy adecuado y excelente, es rodar tu cuerpo de espaldas sujetando tus rodillas con las manos, con movimientos hacia adelante y hacia atrás. Estos son ideales para relajar la espalda.
En conclusión podemos asegurar que el lumbago es uno de esos dolores que seguramente en algún momento sentiste pero no le diste mayor importancia y seguramente no buscaste ayuda médica por considerarlo de bajo riesgo. Sin embargo, es importante conocer y realizar los ejercicios que aquí te hemos recomendado para evitar cualquier complicación o dolor más intenso.