¿Cómo se define una adicción a la tecnología?
La conducta adictiva es peligrosa y produce dependencia, impidiendo que la persona logre deje de consumirlo a menos que haya una fuerte voluntad y decisión. En lo que se refiere a una adicción tecnológica, se percibe principalmente en uso inadecuado y desmesurado del teléfono móvil, de los videojuegos, de Internet. La persona empieza a perder la posibilidad de gestionar adecuadamente el tiempo, generando incluso episodios de estrés y ansiedad si no puede usar la tecnología a la que es adicto.¿Qué síntomas indican una adicción a la tecnología?
Al igual que otras adicciones, hay distintos cambios en el comportamiento e indicios que pueden indicar que la persona está sufriendo una adicción hacia determinadas tecnologías. Es importante prestar atención, porque los primeros que pueden notar esto son los que forman parte del entorno más cercano. Amigos y familia tienden a detectar cambios en la personalidad y en las actitudes de la persona, y desde ese momento ya hay que actuar para evitar que pase a mayores.Aislamiento social directo. Los adictos a las nuevas tecnologías tienden a relacionarse con otros, pero siempre a través de herramientas informáticas. Escapan al contacto directo en el mundo real.
Desatención de las actividades diarias. No es raro que los adictos a las nuevas tecnologías ignoren sus actividades diarias; desde alimentarse y bañarse, hasta el cuidado de mascotas, plantas o de la propia persona
Dependencia excesiva de la tecnología. Es común que un adicto a las nuevas tecnologías se sienta incapacitado para realizar actividades de la vida diaria si no es mediante la gestión con medios digitales.
Tiempo de uso descontrolado y excesivo.
Episodios de ira, tristeza e irritabilidad ante la imposibilidad de usar las TIC.
Reducción de las horas de sueño, con las consiguientes consecuencias que esto trae al organismo.
¿Qué consecuencias trae la adicción a las nuevas tecnologías?
En primera medida, el adicto a las nuevas tecnologías destruye el mundo real y su relación con el mismo, pasando a darle mayor importancia a la versión digital de su vida. También suelen aparecer, en los casos más extremos, episodios de nomofobia. Esto es un miedo irracional a estar sin el teléfono móvil o a encontrarnos en una situación en la que no se puede utilizar.La vida diaria del individuo se ve muy deteriorada al estar imposibilitado de entender e interactuar con el mundo real. Por eso es extremadamente importante trabajar con profesionales de la salud mental para poder encarar una recuperación ante situaciones de adicción a las nuevas tecnologías.