El ejemplo clásico de la persona adicta al alcohol, nos muestra que muchas veces sus relaciones interpersonales se ven dañadas y esto apareja también conflictos laborales. Por su necesidad de alcohol, puede llegar ebrio a casa o a su lugar de trabajo, y esto genera en su entorno respuestas tendientes a evitar las acciones que ponen en peligro el normal desarrollo de las actividades. No es raro que una persona con problemas de alcoholismo pierda su empleo o termine en una ruptura con su pareja o incluso imposibilidad de ver a sus hijos.
¿Existen muchas adicciones diferentes?
Un listado de adicciones puede ser muy extenso, ya que hay numerosas actividades que pueden terminar volviéndose una adicción para un individuo, incluso el trabajo puede ser una adicción. La clave para confirmar un comportamiento adictivo, es que la persona depende de eso para su correcto desempeño en el día a día. Fármacos, drogas, actividades, alimentos, una adicción hará que la persona víctima, no pueda prescindir de ello para vivir.La dependencia a determinadas conductas, hace que las personas se vuelvan adictas: al juego, al teléfono móvil, al deporte, al sexo. En estos casos, vemos que la vida del adicto gira en torno a conseguir suplir esas necesidades en su día a día, a todas horas y sin ningún tipo de restricción.
¿Por qué hay personas propensas a la adicción?
Entender qué es una actitud adictiva, nos lleva a una segunda pregunta. ¿Por qué se vuelve adicta una persona? En la mayoría de los casos, la adicción es una manifestación del intento de evadir una insatisfacción con la realidad que vivimos. Se trata de una actitud de escape, incluso si la persona no es consciente de su insatisfacción. Esto genera que muchas veces, en vez de buscar ayuda profesional, entiendan que el consumo o la actitud adictiva es lo que los hace sentirse bien.Las adicciones tienden a comenzar en pequeñas dosis, de manera puntual y llevando adelante el acto en contextos habituales. Esto genera una cierta familiaridad que termina potenciando la atracción hacia la sustancia o actitud adictiva. A medida que avanza en gravedad, la adicción dificulta que las personas puedan llevar adelante un estilo de vida normal y saludable. No es raro escuchar historias de adictos que mienten, roban y se desprenden de todos sus bienes con tal de poder seguir practicando su adicción. Esto es muy notable en la pérdida definitiva que sufren las personas adictas al juego, y que en muchas ocasiones terminan aisladas de sus familiares e incapaces de llevar adelante una vida normal.