En la vida hay decisiones que cuestan de tomar, nos hacen falta motivos para decidirnos; nos falta seguridad, etc. Cómo afrontar un nuevo estilo de vida cuando realmente no sabemos bien de que manera encauzar los cambios que en nuestra vida se producirán. Esto ocurre con frecuencia cuando salen noticias sobre nuevas dietas o estilos de vida que se ponen de moda; pero el hecho de llevar a cabo una dieta vegetariana, no es como el que empieza una dieta como cualquier otra; es cuestión de creencias.
Es una forma de vida que te caracteriza y además te beneficia. A continuación te ofrecemos una serie de motivos que te pueden servir de ayuda para tomar la determinación de cambiar tu forma de vida.
Comenzaremos por las razones nutricionales, que son las que más nos van a beneficiar ya que repercuten directamente sobre nuestro organismo.
En primer lugar las grasas vegetales son más saludables que las de origen animal. Las grasas de origen vegetal poliinsaturadas tienden a disminuir la tensión arterial mientras que las de origen animal la eleva.
En numerosos estudios realizados a personas que no consumían carne y que ingerían poca grasa animal, se ha descubierto que la tendencia a sufrir enfermedades cardiovasculares y coronarias es mucho menor. Es decir, las dietas bajas en contenido graso mejoran la salud cardiovascular.
El alto contenido en fibra presente en los alimentos que ingerimos en la dieta vegetariana, hacen que la incidencia en problemas del tracto digestivo sean menos probables. La fibra facilita la eliminación de residuos, y por consiguiente hacen que no se acumulen toxinas en el organismo. Lo que favorece la correcta hidratación y depuración del organismo, previniendo la tan temida hinchazón y disminuyendo el riesgo de sufrir cáncer de colon.
Además de aportarnos fibra muchos vegetales como por ejemplo el brócoli, coles, o frutas silvestres y ácidas nos aportan gran cantidad de antioxidantes, que nos mantienen las células frente al envejecimiento celular.
Una dieta vegetariana debidamente equilibrada nos ayuda a controlar la diabetes, si basamos nuestra dieta en vegetales, frutas, cereales.
La dieta oriental, en la que predomina el consumo de cereales y verduras y que la carne se consume como guarnición los casos de diabetes son muy raros, mientras que en la dieta occidental en el que esta más extendido el consumo de carne son mucho mayores los casos.
La carne actualmente, está muy procesada.
Los animales están cada vez más medicados, tratados para que crezcan rápidamente para su consumo. La carne no tiene propiamente las propiedades que se le atribuye, porque está adulterada.
Realmente, el consumo de carne, especialmente la roja; es perjudicial para la salud y está relacionada con una mayor frecuencia de varios tipos de cáncer,especialmente de colon.
Aumenta tus conocimientos sobre nutrición cuando te haces vegetariano pues tratas de buscar las opciones correctas para que tu organismo tenga todos los nutrientes necesarios.
La dieta es más económica dado que tanto la carne como el pescado son productos con un precio bastante elevado mientras que los cereales y legumbres son productos de primera necesidad al alcance de cualquier persona con ingresos medios, las verduras mientras tanto tienen un precio asequible aunque no tan bajo como los cereales y legumbres.
Si buscas otros motivos, no esencialmente nutricionales podremos hacer referencia a que no le causamos mal a los animales, o que mejoramos la situación medioambiental etc.
Si aún tienes dudas puedes empezar a probar durante un tiempo, a ver qué tal te sientes. Seguro que no echas de menos la carne y te pasas a la vida sana y vegetariana. También puedes ver en este artículo la dieta vegetariana que hizo la Cantante Adele con la que consiguió adelgazar mucho.