Entre muchos otros factores, tales como; enfermedades endocrinas, malos hábitos alimenticios, vida sedentaria, etc…, la ingesta de ciertos medicamentos o medicinas tienen como efecto secundario directo el aumento de peso. Esto no significa que tenga que ser necesariamente así, ¿te pasa a tí? pues este efecto secundario no siempre sucede aunque es bastante probable.
Hay tratamientos crónicos necesarios, de los que no nos podemos deshacer de ellos, pues los necesitamos para mejorar nuestra salud, pero también hay una cierta parte de la población que ingieren medicamentos por rutina, sin estricta necesidad, por ello, no está de más, al menos, conocer cuáles son los medicamentos que pueden influir más en un aumento de peso. No obstante, lo más importante siempre será perseverar nuestra salud y hacerle caso a nuestro médico.
La creencia popular nos indica que los antidepresivos son los únicos fármacos que engordan, aunque esto no es del todo cierto, pues hay algunos otros medicamentos que promueven el aumento de peso. Existen medicamentos que tienen la capacidad de influir en el metabolismo, bien provocando la estimulación del apetito, favoreciendo la retención de líquidos o bien produciendo el almacenamiento de tejido adiposo o grasa en nuestro organismo.
LITIO, VALPROATO
¿Quienes los usan? Pacientes tratados por trastorno bipolar
Los mecanismos de acción de estos fármacos interfieren en nuestro metabolismo modulando la secreción de leptina, esta es la conocida hormona del hambre la que nos avisa de que ya estamos llenos, por lo que si frenamos la producción de leptina seguiremos teniendo apetito.
BETABLOQUEANTES
¿Quienes los usan? Pacientes tratados por hipertensión arterial, infartos, anginas de pecho, arritmias, etc. (Atenolol, Metoprolol).
El mecanismo de acción de este fármaco pasa por bloquear la liberación de adrenalina por lo que decelera los impulsos nerviosos del corazón, por tanto, el corazón no tiene que esforzarse tanto para satisfacer a nuestro organismo y se enlentece nuestro metabolismo y gasto energético y por tanto la capacidad de nuestro organismo de quemar calorías. Este tipo de fármacos también pueden llevar a aumentar nuestra sensación de fatiga por lo que nuestra tendencia será a movernos menos y por tanto a reducir nuestra actividad física.
ANTIDEPRESIVOS
¿Quienes los usan? Pacientes tratados de depresión o ansiedad. (Fluoxetina, Paroxetina, Imipramina).
Algunos tipos de medicamentos para el tratamiento de la depresión producen aumento de peso por efecto directo sobre la metabolización de las grasas. Al ser tratamientos largos se suele ir aumentando de peso de forma lenta pero progresiva. Además hay que añadir que los estados de depresión llevan al decaimiento e inactividad física.
CORTICOIDES
¿Quienes los usan? Pacientes tratados por enfermedades autoinmunes o inflamatorias.
En este caso el aumento de peso que provocan estos fármacos están más asociados a la acumulación de líquidos que generan estos medicamentos que al aumento de grasa corporal. Muchos pacientes explican que se hinchan como un globo cuando los toman pero que este efecto desaparece cuando los dejan de tomar.
ANTICONCEPTIVOS
¿Quienes los usan? Pacientes tratados para estimular ovulación, aliviar síntomas asociados a la menopausia o enfermedades de quistes o endometriosis.
Este tipo de medicamentos compuestos en general por un derivado de estrógenos y por otro derivado de la progesterona; aumentan la retención de líquido en nuestro organismo y también pueden provocar debido a los cambios hormonales un aumento del apetito.
INSULINA
¿Quienes los usan? Pacientes aquejados de diabetes.
Este medicamento tiene como objetivo controlar el nivel de azúcar en sangre. En ocasiones, sobre todo al inicio de un tratamiento al no estar controlados los niveles de azúcar puede que bajen más de lo normal generando una sensación de hambre en la persona y por tanto haciendo que aumente su apetito de forma descontrolada. Una vez controlados y estabilizados los niveles de azúcar en sangre no tiene por qué haber ningún aumento de peso.
ANTIHISTAMÍNICOS
¿Quienes los usan? Pacientes aquejados de alergias.
Hay dos tipos de medicamentos; aquellos denominados los de primera generación sí que pueden ocasionar como efecto secundario un aumento de peso ya que pueden provocar una retención líquidos en nuestro organismo.
Después de conocer todos estos detalles sobre estas medicinas que nos pueden hacer engordar, RECOMENDAMOS no caer en el error de interrumpir el tratamiento (sus beneficios siempre serán mayores que coger un poco de peso). Lo que puedes hacer para mantener tu peso a raya es cambiar pequeños hábitos en tu estilo de vida para contrarrestar estos efectos, aquí unos pequeños consejos:
Haz más ejercicio (Puedes empezar por evitar el ascensor y hacer ejercicio mientras subes escaleras, también puedes salir a pasear o a hacer running entre otros…).
Introduce pequeños cambios en tu dieta, come más sano, evita el azúcar y los alimentos procesados; una dieta antioxidante quizás te pueda venir bien para combatir el efecto secundario de los fármacos.