Juan Foa, el hombre que jamás dice "no puedo"

Juan Foa es el ejemplo de que la vida siempre tiene una nueva oportunidad para los valientes. Es un hombre sereno y metódico al que le gusta ir por la vida al mando del timón. Sabe que Roma no se hizo en un día. Sabe que el tiempo premia la perseverancia. Todo eso es lo que le ha permitido marcar un hito, cambiar el mundo.

Juan repite una frase con mucha frecuencia: “Hay que sacarse el no puedo de la cabeza”. Eso también lo dicen muchos libros de autoayuda. Pero a diferencia de estos, Juan Foa ha escrito la frase con su ejemplo, con la inclaudicable voluntad que lo llevó a ser destacado como “personalidad de vida” por la Legislatura de Buenos Aires. En él todo es auténtico. No habla por hablar. Simplemente da testimonio de lo que él mismo ha conseguido.

Este argentino de 37 años pasó por una experiencia estremecedora a los 20. Estaba jugando volibol cerca a una pileta (piscina o alberca). Rompió una de las normas de seguridad en esos lugares: corrió por el borde. Sin saber a qué hora, resbaló y se golpeó en la cabeza. Cayó en el agua, inconsciente.

Sufrió una lesión medular de tipo C5. Su vida había cambiado para siempre debido a un accidente que puede ocurrirle a cualquiera. Ahora no podía moverse: del cuello para abajo, su cuerpo no le respondía. En ese entonces era un joven estudiante de economía para quien el futuro se había convertido en un gran interrogante.

Un paso a la vez

Juan Foa hace un énfasis especial en la importancia de proponerse metas realistas y luchar por alcanzarlas. En ese orden. Las metas realistas son aquellas que, por difíciles que parezcan, se pueden alcanzar. Lo que alimenta ese proceso es la motivación: tener un por qué y un para qué luchar. Se debe tener cuidado con las metas imposibles porque solo te conducen a la frustración, como lo aclara Juan.

Su primera gran meta era desafiar el pronóstico médico. Le habían asegurado que no lograría levantarse de la cama. Juan sabía que la medicina no es una ciencia exacta y apostó a que, pese a su buena voluntad, los médicos podían estar equivocados. Acertó. Comenzó a trabajar en su rehabilitación y consiguió levantarse de la cama. Ahora tendría que movilizarse en silla de ruedas, pero su avance era innegable.

Lograr una meta motiva a lograr más. La siguiente meta de Juan fue la de volver a trabajar al lugar en donde estaba empleado cuando sufrió el accidente: el Banco Francés. No quería quedarse tirado por ahí esperando una pensión. Por eso luchó incansablemente, día tras día, y después de un año y medio lo logró.

El siguiente paso era volver a la universidad. Tuvo que sortear toda serie de obstáculos, pero también consiguió su título como Licenciado en Comercio Internacional. Algo faltaba, en todo caso. ¿Qué era? El deporte. Juan ama el deporte. Además, tenía entre ceja y ceja un deporte de equipo: el rugby.

De paciente a maestro

Juan había viajado a Suiza en 2003. Allí se enteró de que el único deporte en equipo para cuadrapléjicos era el rugby. Volvió a Argentina con el eco de esto en la cabeza. Buscó, pero no había práctica de ese deporte en su país. Ahí surgió una nueva meta. Si no existía, él lo haría posible.

En 2005, con la ayuda de su amigo Ignacio Rizzi, llevaron a Argentina el “Quad rugby”, o rugby sobre silla de ruedas. Juan Foa e Ignacio Rizzi se propusieron llevar el tema a otro nivel. Primero participaron en un torneo en Colombia, representando a su país. Después lograron clasificar al mundial en un emocionante partido final contra Brasil. A Juan y a su equipo se les debe el honor de haber sido el primer conjunto latinoamericano en ir a un mundial de esa disciplina.

Actualmente, Juan Foa es el capitán de la selección nacional. Pero no solo eso. También es el delegado del Quad Rugby en Sudamérica y el presidente de la International Wheelchair Rugby Federation (IWRF).

Juan es altamente competitivo y adora ganar. Sin embargo, las medallas no son lo que más lo trasnocha. Él mira más allá. Lo que quiere es seguir promoviendo el Quad Rugby en Argentina. Que cada región tenga su equipo y haya un torneo nacional del más alto nivel. Que más y más jugadores se acerquen al deporte y con ello mejoren su calidad de vida. Esa es la próxima meta. Todos los que lo conocen saben que lo logrará.

Fuente: este post proviene de Tu Historia, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado:
¿Qué te ha parecido esta idea?
Esta información nunca debe sustituir a la opinión de un médico. Ante cualquier duda, consulta con profesionales.

Esta idea proviene de:

Y estas son sus últimas ideas publicadas:

Etiquetas:

Recomendamos