Los estantes destinados a limpieza y desinfección de las grandes superficies nos ofrecen una amplia variedad de estos productos. Creemos que utilizarlos es la única manera para mantener la casa reluciente. Esto es totalmente falso y además dañino para nuestra salud. Los productos químicos que se utilizan en los productos desinfectantes son muy peligrosos.
Productos químicos por todas partes
La mayoría de los productos químicos que compramos para la limpieza tienen componentes nocivos para la salud. Cuando inhalamos estos componentes podemos intoxicarnos o provocar reacciones alérgicas en nuestro cuerpo. Hay muchas amas de casa y personas que trabajan realizando limpieza que sufren enfermedades derivadas de su uso. Entre los síntomas que provocan estas enfermedades se encuentran eczemas en las manos y brazos, dermatítis alérgicas, trastornos respiratorios, etc. Esto es debido a la exposición prolongada a estos productos.
Además de los efectos adversos que provocan en las personas que lo usan estos productos dañan seriamente el medio ambiente. Cuánto más potente sea la acción desinfectante o limpiadora más químicos contiene el producto y, por lo tanto, mayor es su toxicidad. Por todo ello, es muy importante que conozcamos las alternativas que tenemos para limpiar nuestra casa sin productos tóxicos.
El vinagre
El vinagre es uno de los productos que más nos ayudarán a limpiar la casa de manera natural. Es fácil de encontrar y muy barato. Desinfecta, quita las manchas, elimina la grasa y los olores, es bactericida, elimina el óxido, y mucho más. Veamos dónde podemos aplicarlo:
Como limpiacristales: Mezcla 1/4 taza de vinagre con 4 tazas de agua y limpia con ello ventanas, cristales y espejos. Seca con papel de periódico para obtener mayor brillo
Para limpiar el interior del frigorífico: Limpia especialmente las zonas oxidadas, si las hubiera, dejando actuar 20 minutos. Aclara después.
Para todo tipo de superficies: Mezcla 1/4 taza de vinagre y 4 tazas de agua y añade una cucharada de bicarbonato de sodio. Puedes limpiar con esta mezcla desde los muebles de la cocina hasta la bañera.
Para quitar el olor a tabaco impregnado en la ropa: Añade a un cubo con agua un buen chorro de vinagre y sumerge la ropa. Después aclara como de costumbre.
En la lavadora: para quitar los olores de la ropa, los restos de detergente o evitar la electricidad estática de la ropa. Añade un poco de vinagre en el último ciclo de lavado, cuando ya no quede detergente.
Para limpiar la cafetera: Haz una mezcla con sal y vinagre y limpia la cafetera con ella.
Para quitar el olor de las manos: Cuando tus manos huelan a ajo o cebolla solo tienes que poner vinagre en tus manos y después enjuagar.
El bicarbonato
Podríamos decir que el bicarbonato tiene miles de usos y no sería una exageración. Entre otras muchas cosas, es un magnífico desodorante. Así mismo es un poderoso desinfectante y desincrustante. Lo podemos utilizar para:
Limpieza azulejos y bañera: Utilízalo como un abrasivo suave que no raya. Pon un poco de bicarbonato en una esponja húmeda y frota las superficies. Después lo enjuagas y, si es necesario, lo secas. Si hubiera suciedad muy incrustada haz una pasta con sal, bicarbonato y agua.
Lavavajillas: Llena un recipiente con agua y pon los platos y dos cucharadas de bicarbonato. Deja actuar unos minutos. Será muy fácil después quitar los restos que hubiera pegados en sartenes y cacerolas.
Limpiador de horno: Haz una pasta con agua y bicarbonato y deja que toda una noche haga efecto. Si quieres más poder limpiador añade vinagre a la mezcla. Por la mañana frota y retira con una esponja. El horno quedará como nuevo.
Limpiador de suelos: Pon media taza de bicarbonato por cada cubo de agua. El suelo quedará sin marcas ni rayas.
Limpieza de plata: Haz una pasta con tres partes de bicarbonato y una de agua y frota con ella la plata. Luego enjuaga y seca.
Desodorante: Pon bicarbonato en tus axilas cada mañana como si fuera desodorante.
Otras sustancias limpiadoras
Hemos visto que el vinagre y el bicarbonato sirven para casi todo. Pero aún hay más sustancias naturales que nos pueden ayudar a limpiar sin recurrir a productos tóxicos:
Cebollas
Las cebollas sirven para quitar óxidos. Si, por ejemplo, tienes una parrilla oxidada frótala con cebolla y se liberará agua, aminoácidos y enzimas que ayudarán a diluir los óxidos que se adhieren a las barras metálicas.
Pepino
Si quieres ver brillar como nunca el acero inoxidable, frótalo con pepino. El pepino es 95% agua, sales minerales y ácido ascórbico. Todos estos componentes dejan una emulsión acuosa sobre tus cacerolas de acero inoxidable que hará que brillen como nunca.
Té negro
El té negro tiene los mismos taninos que están presentes en las cortezas de los árboles. Por este motivo, si aplicas una infusión de té negro a tus suelos de madera, estos recuperarán sus tonos naturales. Así mismo, mantendrás el desarrollo de microorganismos a raya.
Sal
Mezclando agua con mucha sal podremos limpiar manchas de sangre. La sal y el agua son los componentes idóneos para producir oxidación. Podemos verlo en ambientes húmedos y salinos de paseos marítimos. La sangre debe su color rojo al hierro que contienen. Si aplicamos una mezcla de agua con mucha sal, produciremos oxidación y, de esta manera, haremos que desparezcan las manchas de sangre.
Ginebra
La ginebra es un estupendo limpiador de gafas o cristales. Por su alto contenido en alcohol, si empapamos un trapo o algodón en ginebra y limpiamos las gafas o cualquier cristal, obtendremos un brillo mayor que con cualquier limpiacristales.
Habrás visto que no hay necesidad de comprar productos químicos para tener toda tu casa limpia y reluciente.
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