En general, cualquier persona que tenga una pequeña desviación en la espalda (así no le provoque dolor) va a provocar una adaptación en la pelvis que hace que una pierna sobresalga cuando nos tumbamos y que una cadera esté más alta que otra cuando estamos de pie. A esto se le llama una falsa pierna corta ya que viene ocasionada por adaptaciones a desviaciones a nivel de la espalda.
Una verdadera dismetría de miembros inferiores viene dada por diferencias de la longitud de los huesos de las piernas, es menos habitual ya que ocurre en un 6 a 8% de la población mundial ya sea por causas congénitas o traumáticas.
Discrepancias de la longitud de las piernas
Las discrepancias de la longitud de las piernas pueden ser causadas por una mala alineación de la pelvis o simplemente porque una pierna es estructuralmente más larga que la otra. Independientemente de la razón, tu cuerpo quiere ser simétrico y hará todo lo posible para compensar la diferencia de longitud. Cuanto mayor sea la diferencia de la longitud, los síntomas se presentarán más temprano. Los diagnósticos específicos que coinciden con la discrepancia de la longitud de las piernas incluyen: escoliosis, hernia discal lumbar, sacroiliitis, oblicuidad pélvica, bursitis trocantérica severa, artritis de cadera, síndrome del piriforme, síndrome patelofemoral y pronación del pie. Otras causas potenciales podrían deberse a una lesión (como una fractura), enfermedad ósea, tumores óseos, problemas congénitos (presentes al nacer) o de un problema neuromuscular.
Clasificación:
Las discrepancias de la longitud de las piernas se pueden clasificar de la siguiente manera:
Discrepancia estructural: suele ser hereditaria, una pierna es simplemente más larga que la otra. Esto se determina midiendo y observando si la pelvis y las articulaciones sacroilíacas del paciente son simétricas y, por lo tanto, la discrepancia de la longitud de las piernas se debe simplemente a que una pierna es verdaderamente más larga que la otra. La mejor forma de determinar si existe una discrepancia estructural en la longitud de las piernas es con una radiografía antero-posterior de la pelvis. Una alternativa clínica es usar una cinta métrica para medir la longitud de la pierna desde la cadera hasta el tobillo.
Discrepancia funcional: se diagnostica cuando existe una torsión o rotación/oblicuidad pélvica, asociada con una disfunción de la articulación sacroilíaca, que hace que una pierna funcione como si fuera más larga o más corta que la otra. Con el fin de determinar si existe una verdadera discrepancia estructural, el fisioterapeuta debe intervenir terapéuticamente la pelvis y devolverla a una posición neutral antes de medir la discrepancia de la longitud de las piernas. Una vez que la pelvis es simétrica se determina si la discrepancia desaparece o permanece. Si desaparece se clasifica como funcional, si permanece y tiene una diferencia mensurable es una discrepancia estructural.
Roberto Junquera