La cromonutrición sea quizás una forma de alimentarse de las menos conocidas, pero no es otra cosa que comer los alimentos, sobre todo vegetales (frutas y verduras) según los colores teniendo en cuenta las propiedades que aportan.
Es una forma muy divertida y creativa de planificar nuestros menús, puesto que a través de la cromonutrición podemos completar nuestras terapias de color, o lo que es lo mismo hacer cromoterapia a través de los alimentos.
¿Y qué beneficios podemos obtener de llevar la cromoterapia a nuestros platos?. Pues son muchas y todas buenas: equilibrar nuestro sistema energético de chakras, enfocarnos en tratar una dolencia concreta o en llevar la armonía a nuestras emociones.
El color desde siempre ha tenido un efecto en nuestro inconsciente y también lo tienen los alimentos cuando ponemos en práctica la cromonutrición, pero esta vez el beneficio es para nuestro organismo.
¿Qué propiedades tienen los alimentos según su color?
Blanco: los alimentos de color blanco son especialmente protectores del sistema inmunitario, poseen efectos antibióticos y expectorantes y favorecen la circulación. Ayudan a combatir las infecciones y mantienen el colesterol elevado a raya. Son especialmente recomendables para la congestión nasal, tos, gripes, resfriados, retención de líquidos y varices. Para la Medicina Tradicional China el color blanco está relacionado con el metal, el intestino grueso y los pulmones, el otoño, la tristeza y melancolía, y el sabor picante.
Los alimentos más comunes de color blanco son:
Coliflor, espárragos, patatas blancas, champiñones, algunas setas, ajo, cebolla, cebolleta, puerro, jengibre, coco, endivias, nabo, peras blancas, ciruelas blancas, yuca, huevos blancos y judías blancas.
Verde: estos son los alimentos detoxificantes por excelencia, tienen beneficios hepato-protectores, son elevados en contenidos de vitaminas y fibras, controlan muy bien el colesterol elevado y limpian el hígado y la vesícula biliar. Son ideales para dietas de adelgazamiento, depuraciones, y dietas para el control de la hipertensión arterial y arteriosclerosis, tienen también alto poder antioxidante. En la Medicina Tradicional China se relaciona el color verde con el elemento madera, el hígado y la vesícula biliar, la primavera, la cólera y el resentimiento y el sabor amargo.
Los alimentos verdes más comunes conocidos son: lechuga, coles de Bruselas, espárragos verdes, alcachofas, brócoli, acelgas y espinacas, apio, berros, algas, calabacín, guisantes, judías verdes, pepino, rúcula, higos verdes, pera verde, aguacate, achicoria, hinojo, cilantro, perejil, orégano, cebollino, salvia, romero, tomillo, kiwis, lima, cardos, uvas verdes, manzanas verdes, pimientos verdes, aloe vera y pistachos.
Rojo: los alimentos de color rojo poseen propiedades antioxidantes, beneficiando la salud cardiovascular y favoreciendo la circulación. Son anticancerígenos gracias a la cantidad de sustancias protectoras que aportan a nivel celular. Para la Medicina Tradicional China el color rojo se relaciona con el elemento fuego, el verano, el corazón, el intestino delgado y la alegría y el sabor ácido. Son alimentos con muy pocas calorías por lo cual son imprescindibles en dietas de adelgazamiento.
Los alimentos rojos más comunes son: tomates, pimiento rojo, manzana roja, rabanitos, fresas, fresones, frambuesas, cerezas, ciruelas rojas, uvas rojas, sandía, granada, grosellas, bayas de Goji, pimienta de Cayena y guayaba.
Naranja: estos son los alimentos que cuidan de nuestra piel y nos ayudan a tener buena cicatrización. También son antioxidantes y anticancerígenos. En la Medicina Tradicional China al igual que el color amarillo se relaciona con el bazo, estómago y páncreas, con el elemento tierra y la interestación, con la preocupación, la obsesión y el sabor dulce. Estos alimentos son los ideales para mejorar la salud de nuestra piel: psoriasis, dermatitis, acné, piel seca, descamada y para la salud ósea: osteoporosis, artritis y artrosis, también protegen frente a los ardores de estómago: gastritis, reflujo y úlceras digestivas.
Los alimentos de color naranja más comunes son: naranjas, calabazas, pimientos naranjas, zanahorias, mandarinas, mango, nectarina, melocotones, albaricoque, cúrcuma, curry, melón naranja, papaya, boniatos, nísperos, caqui, pomelos.
Amarillos: los alimentos amarillos aportan beneficios para la salud digestiva y de la piel. En la Medicina Tradicional China se relacionan con las mismas características que con los alimentos naranjas. Mejoran la salud ocular, evitando la degeneración macular, son anticancerígenos y también fortalecen el sistema inmunológico previniendo y tratando las infecciones. Mejoran la salud digestiva y son antioxidantes.
Los alimentos amarillos más comunes son: plátanos, maíz, patatas, ciruelas amarillas, piña, limón, maracuyá, soja amarilla, lenteja amarilla, pimientos amarillos, peras amarillas, melón amarillo, quesos, fenogreco o alholva y garbanzos.
Morados: estos son los alimentos antiage por naturaleza. Proporcionan longevidad, buena salud ocular (glaucoma, cataratas, vista cansada y conjuntivitis) y presta ayuda a los alérgicos. Son ideales para tener una excelente salud del aparato urinario puesto que gracias a sus propiedades bactericidas ayudan en las cistitis. Algunos alimentos de este grupo presentan un color de morado a azulón, con lo cual en la Medicina Tradicional China podemos relacionarlos con el elemento agua, el invierno, los riñones y la vejiga, la identidad y el miedo y el sabor salado.
Los alimentos morados más conocidos son: las berenjenas, la col lombarda, las uvas moradas, los arándanos, ciruelas moradas, moras, zarzamora, grosella negra, lavanda, acai, espárrago morado, cebolla morada, patatas moradas, higos morados, endivias moradas, lechuga de hoja de roble, pasas, remolacha y azukis.
Marrones: los alimentos marrones son los más energéticos, nos proporcionan calor y energía, y nutrientes esenciales: aminoácidos, vitaminas y minerales. Son estimulantes, protegen los órganos y deben ser incluidos en una dieta equilibrada para un buen mantenimiento de la salud, tienen especial efecto en la actividad mental.
Los alimentos marrones más comunes son: castañas, nueces, almendras, nuez moscada, avellanas, cacahuetes, chocolate, anís estrellado, clavo de olor, lentejas marrones, patatas, canela, café, lino, sésamo, maca, achicoria, algunas setas, orejones, dátiles, arroz integral, huevos, harina integral, algarroba, vainilla, coco, la miel y el azúcar moreno.
¿Pero... de dónde vienen los beneficios de estos alimentos por su color?
Los fitonutrientes son fitoquímicos encargados de dar el color y sabor a los alimentos. Estos compuestos abarcan más de 600 tipos diferentes dentro de la naturaleza y se clasifican en cuatro categorías principales:
Antioxidantes: previenen la degeneración celular combatiendo a los radicales libres y contribuyen a una buena salud cardiovascular. Ejemplo: lycopeno presente en los tomates.
Desintoxicantes: son los grandes limpiadores del organismo ayudando a la depuración de sustancias tóxicas. Ejemplo: indoles en el brócoli.
Moduladores hormonales: que imitando el efecto de las hormonas más importantes contribuyen al buen funcionamiento hormonal, ejerciendo una acción reguladora. Ejemplo: isoflavonas presentes en la soja.
Reguladores celulares: sustancias de vital importancia puesto que son los encargados de controlar el crecimiento de células dañinas para el organismo. Ejemplo: resveratrol en la uvas.
Cómo podemos ver la cromonutrición tiene un sentido y está basada en principios científicos, que podemos comprobar a través de los compuestos fitoquímicos presentes en los alimentos.
Incluirlos en nuestra alimentación diaria es algo muy fácil, puesto que si vemos que con cierta regularidad nos falta algún color en nuestra nevera o despensa, es que estamos necesitando los nutrientes de esos alimentos para equilibrar nuestra alimentación y organismo.
Sofía Pencef
Fuente: este post proviene de Bionutrición Ortomolecular, donde puedes consultar el contenido original.
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