Consejos
Desde el Instituto Varilux nos apuntan doce fantásticos consejos para evitar terribles consecuencias a largo plazo en nuestros ojos:
Limpieza extrema: es muy importante que tanto los envases de los cosméticos como la bolsa donde los guardamos se encuentren siempre limpios. Así, evitaremos la contaminación con bacterias que pueden provocar una infección ocular. Lávate siempre las manos antes de aplicarte el maquillaje y cierra bien los envases cuando termines de usarlos.
Elige maquillaje de calidad: siempre que puedas, evita aquellos productos que contengan componentes químicos y materiales 'pesados' como zinc, aluminio, disolventes o tintes industriales, etc. Además, si tienes los ojos sensibles es recomendable que busques productos elaborados a base de extractos naturales.
No humedezcas los productos: ante un cosmético reseco, no utilices agua y mucho menos saliva para humedecerlos, podrías contaminarlos con bacterias.
No compartas los cosméticos: por razones de higiene, los cosméticos, especialmente los de los ojos, no deben compartirse. Si vas a probar una muestra en alguna tienda, hazlo siempre con un aplicador desechable y pruébalo siempre sobre la piel de la mano antes de aplicarlo en el ojo.
Si te causa irritación, ¡deséchalo!: siempre que un producto te provoque alergia o te cause molestias en el ojo, se enrojezca o te cause escozor, deséchalo sin pensarlo dos veces. Por supuesto, si la irritación persiste deberás consultarlo con un especialista.
El maquillaje caduca: aunque no lo parezca, el maquillaje de ojos también tiene fecha de caducidad. Fíjate en el envase, debe ponerte cuántos meses dura una vez abierto. Así, por ejemplo, elimina el bote de rímel después de dos o tres meses o si ya está seco y grumoso.
Cuidado con la temperatura: no dejes tus cosméticos en ningún sitio donde puedan estar expuestos a un exceso de frío o calor, eso podría alterar su fórmula y la efectividad de los conservantes que contienen.
Si tienes una infección de ojos, no te maquilles: además deberás deshacerte de todos los productos que estabas usando cuando se inició la infección para no volver a contagiarte.
Aplícalo correctamente: muchas mujeres utilizan el lápiz de ojos por dentro de las pestañas, ¡qué gran error! Esta forma de alinear no es aconsejable, ya que, al entrar el producto en contacto directo con el ojo, puede propiciar la irritación de los mismos o la aparición de conjuntivitis y alergias.
Si usas lentillas... los problemas que puede provocar el mal uso del maquillaje se incrementan, ya que el maquillaje favorece las infecciones en la lentilla. ¡Cuidado!
A lo hora de desmaquillarte... es fundamental que te vayas a la cama sin rastro de maquillaje en los ojos, pero algunos desmaquillantes también pueden lastimar la piel de los parpados y afectar al lagrimeo de los ojos. Para evitarlo, debemos leer con detenimiento la composición, evitando aquellos que contengan alcoholes u otros componentes agresivos para la piel.
Y siempre... ante cualquier irritación o molestia consulta con un oftalmólogo para su exploración y tratamiento.
La belleza y la salud siempre deben ir de la mano, ¡cuídate!
Agradecimientos: Instituto Varilux.
Imágenes (por orden de aparición): Ashley Harrigan/Flickr y Kyle May/Flickr.