Para saber cómo identificar tus patrones mentales, primero debes indagar en tu interior y hacer un trabajo de investigación contigo mismo. De esta manera podrás encontrar esa información instalada en tu inconsciente.
¿Dónde se busca esa información?
Debemos buscar esta información a tres niveles:Proyecto Sentido
Llamamos Proyecto Sentido al período de tiempo que abarca desde los 9 meses antes de la concepción hasta los 3 años de edad (aproximadamente).
En este período, los conflictos emocionales vividos por la madre son de transcendental importancia, ya que determinan en gran medida la conducta y la biología de su hijo.
Durante esta etapa, los niños son como esponjas que registran todo lo que escuchan, todo lo que ven, todo lo que viven sin ningún filtro, de manera que quedan programados por todas las personas de su entorno y que ellos consideran de autoridad (padres, abuelos, profesores)
Por eso es muy importante estudiar cuáles fueron los condicionamientos de nuestra concepción: si fuimos un bebé deseado en ese momento, si no lo fui y mis padres se plantearon el aborto, si querían un varón y fui una niña, si fui inesperado o por accidente
En definitiva, la pregunta sería:
¿Qué pasaba por la cabeza de mis padres antes de que yo fuera concebido, en el útero materno y a mi temprana edad?
Edad cronológica
Esta edad engloba todos los conflictos emocionales que se viven desde el nacimiento hasta la edad actual, excluyendo la etapa de Proyecto Sentido.Siempre que existe un síntoma, previamente ha existido una situación determinada de estrés emocional que es la que lo desencadena.
Y todo el contexto que envuelve a esa situación está relacionado con información guardada en el inconsciente familiar.
Por eso, cualquier mínimo detalle puede llevarnos al exceso (reacción o comportamiento desproporcionado) oculta un conflicto emocional guardado en el inconsciente, que activa un programa concreto de supervivencia que llevamos instalado en ese inconsciente.
Nuestro cerebro contiene engramas, que serían las huellas neurofisiológicas que ha dejado una situación de estrés emocional, y que forman redes neuronales.
Los engramas pueden almacenar cualquier tipo de dolor, así como sensaciones, palabras, hechos, lugares, ruidos, etc.
Cualquier situación que se asocie a uno de los elementos que conforma el engrama, puede disparar un síntoma aparentemente superado.
Transgeneracional
La prioridad del Inconsciente familiar es siempre la supervivencia para asegurar la continuidad del clan.
Por eso, ha aprendido a poner en marcha determinados mecanismos de defensa ante ciertas situaciones que han quedado grabadas como peligrosas.
Estas situaciones son experiencias que han vivido los miembros del clan familiar y que han generado un estrés emocional.
Esta es la razón de que, algunas veces, nuestro cuerpo reaccione a nivel biológico incluso ante situaciones que no hemos vivido anteriormente, pero que han quedado grabadas en el inconsciente familiar y que disparan, como explicábamos anteriormente, un engrama y una memoria.
Es de vital importancia, por lo tanto, tomar conciencia de estos conflictos familiares para conseguir deshacer y desactivar los síntomas.
El estudio de nuestro árbol genealógico nos va a permitir
Comprender nuestros programas heredados y liberarnos de cargas.
Desentrañar los programas que nos hacen vivir situaciones repetitivas o excesivas.
Entender que la información no se pierde, que se transmite de padres a hijos con el objetivo de que alguien del clan pueda liberar y transformar tal información.
Como dijo Anne Schützenberg, psicóloga rusa y pionera en el estudio de nuestro árbol genealógico:
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Transgeneracional: Los programas heredados que condicionan nuestra vida
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