Consejos para calmar la ansiedad
1. Si estás a dieta, este año es un buen momento para convertirte en anfitrión de la velada y preparar platos de cocina caseros con los que sorprender a tus invitados. Los menús caseros son más ligeros que aquellos que ofrecen los menús del día de los restaurantes.
2. Los postres caseros también son más saludables que la repostería o la bollería industrial. Sin embargo, la fruta también puede ser gran protagonista durante la Navidad.
3. Compensa los excesos de la Nochebuena y la Nochevieja, con días en los que disfrutes menús más ligeros. De este modo, a través de este efecto de compensación en la balanza también puedes sobrevivir a las fiestas de Navidad sin coger kilos de más.
4. Adopta una actitud proactiva en la mesa. En lugar de sentarte y estarte quieto durante tanto rato. Levántate para recoger platos y traer otros nuevos, organizar en la cocina e incluso, fregar. Disfruta también de los temas de conversación puesto que cuando te concentras en una charla agradable, la comida también queda en un segundo plano.
5. Puede que en estas fechas tengas más eventos señalados en tu agenda. En ese caso, también puedes buscar medidas que te ayuden a ti a respetar tu dieta en Navidad. Por ejemplo, si tienes una comida con amigos, acude al momento del café para disfrutar de la sobremesa. No seas esclavo de la Navidad, tú eres dueño de tu estilo de vida en este tiempo.
6. Intenta no saturar tu cesta de la compra de dulces navideños. Elabora esta lista de la compra en relación con los menús que vas a disfrutar en tu día a día. La Navidad tiene principio y final, sin embargo, tu objetivo de dieta va más allá de este periodo concreto del año. Por tanto, te compensa ser fiel a este objetivo y continuar con el trabajo previo que has realizado que relajarte y dar rienda suelta a las tentaciones navideñas. Define tu plan de acción nutricional en Navidad y síguelo como una hoja de ruta.
7. No comas con ansiedad o impaciencia. Disfruta de los sabores, mastica cada producto con tranquilidad. Saboréalo como un buen manjar. De este modo, realmente, evitas comer por ansiedad.
8. Las prohibiciones al extremo suelen producir el extremo opuesto de grandes efectos rebote. Por tanto, vive la Navidad desde la libertad de saber que eres humano. Que la dieta no te amargue lo mejor de la Navidad: un tiempo para ti, para despedir el año con alegría y compartir esos momentos con la familia.
Sigue las indicaciones de tu nutricionista para hacer dieta en esta época del año con un criterio saludable.
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