La ansiedad, a veces, es el resultado de la acumulación de tensiones internas y de ese pensamiento que produce un efecto de rumiación a nivel psicológico. Más allá de cuáles sean las causas, si no has atendido a tiempo ese malestar, piensa que sí puedes actuar a partir de sus efectos. Y el efecto de la ansiedad como un malestar de preocupación y aceleramiento que empieza a surgir en una mala racha es negativo. En Psicología y Autoayuda nos gustaría ayudarte a reconducir la situación.
Détox digital
Una dieta marcada por la distancia del plano tecnológico puede ser saludable desde el punto de vista del descanso. De lo contrario, tu mente bucea por la cantidad incontable de datos de internet y llega un momento en el que te sientes saturado por tantos datos. El exceso de información puede ser tan negativo como la carencia ya que el conocimiento también está acompañado de la reflexión.
Dormir
El placer del descanso es uno de los que primero se ve alterado por la ansiedad. Intenta descansar, incluso, puedes disfrutar de una pequeña siesta durante la tarde. Intenta escuchar el ritmo de tu propio cuerpo en este momento y que tu organismo te pida descanso.
Busca la colaboración
Es muy posible que tengas tareas y ocupaciones familiares que no puedes ignorar. Sin embargo, sí puedes trabajar en equipo para lograr esas metas. Por ello, busca la colaboración de tu pareja o de tu familia para que te apoye en determinados aspectos mientras te centras en tu descanso.
Volver a casa de los padres
Existe un gesto de reencuentro con la niñez en la experiencia de volver durante unos días al nido materno. Volver a ese lugar en el que fuiste niño y te sentiste cuidado por esas personas que en cierto modo siguen protegiéndote incondicionalmente.
No todas las personas pueden vivir esta experiencia. Si este es tu caso, piensa en qué familiar te conoce bien y se alegrará de recibirte durante un fin de semana, por ejemplo. Es positivo que te dejes acompañar y mimar por los demás.
Este consejo es especialmente recomendable si vives solo y no te apetece sentirte así ahora mismo.
Llora y expresa tu desahogo
Llorar no soluciona nada en los términos pragmáticos, pero sí soluciona un mundo en relación con el bienestar emocional ya que es muy posible que tengas un nudo que no te deja liberar ese desahogo y esa tensión acumulada.
Por esta razón, no dudes en darte la libertad de llorar. Tal vez sientas que el mundo no te comprende, que nadie puede entender de verdad tu dolor. Sin embargo, todos somos humanos y esa es la clave de la empatía ante el sufrimiento.
Intenta tener una compasión positiva hacia ti mismo, es decir, no te culpes por sentirte de este modo.
El libro “El poder positivo de las emociones negativas” puede darte grandes lecciones de autoayuda en este momento de tu vida. ¡Cuídate mucho!
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