Esta vitamina está formada por diversos tipos más, ya sea la B1, B2, B12, B6… entre los principales beneficios que nos aportan aquellos alimentos que llevan este tipo de vitamina se encuentra la vitalidad y la energía que nos da, además de la mejora en producción de hormonas, el fortalecimiento de la salud arterial y del corazón, llevar un buen funcionamiento del sistema nervioso, un mantenimiento de la circulación…
En líneas generales los alimentos más ricos en esta clase de vitamina son los pescados azules, el hígado de diversos animales y los frutos secos. En este caso, destaca el atún, pero también determinados lácteos, encontrándola en el queso, el yogur… Entre las legumbres, está la espinaca y la col, mientras que las patatas incorporan vitamina B. Y si citamos la fruta, es el plátano el que presenta este tipo de vitamina. Los frutos secos son realmente muy buenos, destacamos los pistachos y los cacahuetes.
Algunos alimentos ricos en vitamina B6 están unidos a un mejor funcionamiento del sistema inmunológico y se encuentra en el arroz, algunos pescados azules como el salmón, el pollo, las especias como la albahaca o el orégano, y los benditos frutos secos que están cargados de vitaminas de diversos tipos, en este caso para la B6 contamos con los pistachos o las avellanas. Mientras que la vitamina B12 está considerada como la más importante dentro de la B y por ello la destacamos. Nos ayuda a poner en funcionamiento el sistema nervioso central, siendo el marisco uno de los más importantes, encontrado en las almejas o las ostras. Mientras que también los pescados azules son ricos en este tipo de vitamina B, un claro ejemplo lo tenemos en la caballa.