Después de haber traído un primer recopilatorio sobre actividades en fisioterapia en geriatría que buscan motivar a los mayores para hacer ejercicio de una forma divertida, os traigo la segunda parte, que sigue en la línea de lo ya expuesto.
En este caso, cuento con la colaboración de otros tres fisioterapeutas que trabajan con personas mayores, y nos cuentan sus experiencias tratando de buscar formas divertidas de motivar y trabajar con los mayores. Aquí os dejo con ellos:
En primer lugar, Joaquín Hernández, @JoaquinHernndez, hace la siguiente reflexión:
"Las actividades en #fisiogeriatria son una de aquellas cosas que tienen <<mala prensa>>. Parece que estan ahí para <<rebajar>> aquello que haga el fisioterapeuta. Pero nada más lejos de la realidad. Las actividades te permiten buscar objetivos que parecen imposibles en el dia a dia y que se consiguen casi sin darnos cuenta en según que circunstancias. Solo paraos a pensar un momento, ¿cuando tu motivación es mayor, cuando estás disfrutando o cuando te aburres como una ostra? Pues eso, cuando estás en una fiesta de cumpleaños y puedes sacar a bailar a aquella residente que no quiere caminar, cuando organizas unas resiolimpoadascon otras residencias y tienes 2 meses entrenando a gente que normalmente se niega a hacer tratamiento (porque él está bien) o una persona con deterioro cognitivo capaz jugar a bolos o lanzar a canasta imitando a los demás. Desaprovechar ese potencial no es un error, es no hacer del todo nuestro trabajo. ¡Ah! ¡¡Y que no se me olvide!! Es renunciar a pasartelo en grande haciendo tu trabajo y viéndolos disfrutar mientras hacen fisioterapia."
Por su parte,Gabriel Liesa @gabifiscat nos habla de su experiecia como <<El Fisio hawaiano>>:
"En la Universidad nos enseñan a aplicar y practicar la fisioterapia. Pero a menudo nos falta conocer el entorno. Y el entorno, en geriatría es muy importante. No me refiero sólo al entorno físico, si no al entorno humano y relacional de una residencia de gente mayor.Por tanto, hay que involucrarse, formar parte de la dinámica del centro, y por tanto, si un día hay una tómbola benéfica en la que hay que todo el personal tiene que disfrazarse de hawaiano , pues al lío. ¿Por que? Por que en la tómbola aprovecharemos para hacer andar a los residentes a buscar el premio que seguro les tocará, y si no estas dentro del entorno, no te aceptarán, no te creerán?y sin creer, no andarán. Y si creéis que lo de hawaiano es broma, sabed que hay fotos. Pero eso tiene un precio ;-)."
Y para terminar dejo la aportación de Inmaculada Arboleda, @inmaArboleda, que es una fisioterapeuta que trabaja en una residencia de mayores en Málaga capital, y nos cuenta de forma extensa una experiencia muy buena que han vivido en una celebración en su centro:
“Con motivo del 40 Aniversario de nuestro centro en diciembre del año pasado organizamos una semana conmemorativa con distintos talleres en los que, no sólo participarían nuestros residentes, sino que contaría con encuentros generacionales con mayores del entorno donde está ubicada la residencia y mayores integrantes de los centros de participación activa de la provincia de Málaga, y encuentros intergeneracionales, con unos 60 niños de entre 8 y 12 años de tres colegios de los alrededores. Voy centrar mi relato en el encuentro intergeneracional, que fue el que más me gustó.
Se organizaron 4 talleres: -Taller de Petanca. -Taller de Gimnasia de Mantenimiento. (T.G.M) -Taller de Zumba Gold. -Taller de Juegos de Mesa. Organizamos el día de la siguiente forma: los residentes se dividieron en distintos grupos que se repartieron entre los talleres, para que hubiera un grupo fijo en cada uno de ellos, los niños se dividían en grupos e iban pasando por dichos talleres. El taller de petanca y el de juegos de mesa los organizó el terapeuta ocupacional, yo me encargué de TGM y zumba, de los que hablaré a continuación.
Por la mañana realizamos el TGM y decidimos dejar el taller de zumba para la hora de la merienda. El TGM es un espacio en el que 2 veces en semana lo pasamos en grande el Terapeuta ocupacional, los residentes y una servidora. Suele consistir en un calentamiento general, movilización activa de todas y cada una de las articulaciones, estiramiento de los principales grupos musculares y ejercicios de tonificación de miembros inferiores y superiores libres y resistidos.
Después trabajamos psicomotricidad con distintos materiales: aros, pelotas de diferentes tamaños, bolos?e incluimos trabajo cognitivo. El día que hicimos el taller con los niños del colegio la motivación era aún mayor: tenían que "lucirse" como decían ellos y demostrarle a los chicos/as que ellos "también hacen deporte y saben divertirse". Y ambos grupos superaron las expectativas. Y para las 17:30? ¡Taller de Zumba!. A todo esto, no habían dejado de participar en los distintos talleres, haciendo sólo un descanso algo mayor para la hora de la comida.
Puede sonar agotador, pero no para nuestros residentes y los niños que nos visitaron, entre los que se estableció una bonita conexión que resultó muy motivadora para ambos. Porque sí, aunque los niños tengan energía para repartir, muchos nos confesaron que, a priori, ir a pasar el día a una residencia de mayores no era el plan más divertido que se les hubiera ocurrido. Los talleres de zumba fueron una sorpresa total, por su acogida y participación por parte de ambos grupos.
Los realizamos en el hall de la entrada, un espacio amplio donde poder darlo todo sin que peligre la integridad de ningún participante. Aquí cada uno hacía lo que podía, y se dieron todas las modalidades: zumba de pie, zumba de pie y con un bastón en la mano, zumba sentado y la que más me gusta, zumba "milagro" (invadida por la emoción dejo andador a un lado y, de la mano de los niños, me pongo a mover el esqueleto). Por supuesto el milagro no era tal, sino que se basaba en motivación y autoconfianza. Sólo deciros que nunca vi esas caderas más sueltas y disociadas, ni esos pasos tan firmes, seguros y ágiles. En resumen, los talleres fueron un éxito total, todo el mundo lo pasó en grande. Hubo muchas sonrisas esperadas y otras muchas inesperadas y sorprendentes, y por ello aún más reconfortantes.
Los niños no querían irse, hicieron muy buenas migas con los "abuelos" (como algunos de ellos les llamaban). Unos abuelos que, como ellos mismos nos decían, eran muy distintos a los abuelos que ven diariamente en casa y que los llevan al cole, al parque?unos abuelos que les sacan unos 20 años mínimo a estos otros abuelos y que son un ejemplo de constancia y de lucha.”
Esta entrada ha quedado un poco extensa, igual que la anterior, muestra de que hay mucho que contar sobre el trabajo que se hace en fisioterapia en geriatría, una actividad donde no hay que perder la imaginación y plantearse retos pues, en muchas ocasiones, los mayores responden más allá de nuestras expectativas.
En una próxima entrada tal vez os cuente todavía más sobre actividades con mayores; en este caso, puede que me anime a contar yo mismo mi experiencia y actividades con los mayores ¿os apetece?
Imágenes por Robert Kneschke y Stocklite en Shutterstock
La entrada Actividades de ejercicio y fisioterapia en geriatria (II) ha sido publicada originalmente en Tufisio.net Blog de Fisioterapia.