Matsyasana o postura del pez
La práctica suave del yoga se adapta a las necesidades de los pacientes de tiroides. Ofrece una recompensa inmediata en forma de energía renovada, el estrés baja, así como se logra una reducción de los músculos y de la rigidez articular. La relajación del cuerpo induce a la calma. Esto es significativo ya que el desequilibrio de los niveles de la tiroides puede causar cambios de humor y depresión. Por lo tanto, es esencial para lograr una curación tanto de la mente como del cuerpo practicar posturas como matsyasana.
Pasos para hacer la postura:
Acuéstese en el suelo con las rodillas dobladas y los pies apoyados en el suelo. Ahora estirar las piernas, coloque sus brazos a cada lado.
Ahora levante las caderas, por un lado a la vez y coloque sus manos en cada cadera.
Doble los codos y empuje la parte superior del cuerpo sobre el suelo; Recuerde exhalar mientras hace esto. Sólo levante su pecho, e incline la cabeza hacia atrás.
Mantenga esta posición durante cinco respiraciones e inhale mientras descansa su espalda en el suelo.
Eka rajakapotasan pada o pose de la paloma
Los niveles de hormonas tiroideas liberadas en el cuerpo son controlados por la glándula pituitaria y el hipotálamo. La postura de la paloma es una poderosa postura para protegerse de enfermedades y rejuvenecer las glándulas tiroideas.
Pasos para hacer la postura:
Iniciar esta postura partiendo de la posición de perro hacia abajo.
Ahora lleve la pierna derecha hacia adelante y coloque la espinilla en el suelo de tal manera que la rodilla se ponga en frente a su mano derecha y la palma de su pie se ponga en frente a la pierna izquierda.
Estire su pie izquierdo hacia atrás mientras extiende sus manos hacia adelante.
Estire sus manos en frente de usted y alargue su vientre.
Mantenga esta posición durante diez respiraciones y luego cambie de lado.
Setubandhasana o la postura del puente
La postura del puente ejerce una presión sobre el cuello que ayuda a estimular la circulación de la sangre a la glándula tiroides para que pueda funcionar de manera óptima y equilibrar las hormonas.
Cómo hacer la postura:
Acuéstese boca arriba, con las rodillas dobladas y los pies apoyados en el suelo. Mantenga los brazos a los lados con las palmas hacia el suelo
Ahora, utilizando la fuerza de sus brazos empuje la pelvis del suelo hacia el techo. Exhale cuando haga esto.
Mantenga su cuerpo levantado de tal manera que el cuello y la cabeza todavía estén apoyados en el suelo y el resto de su cuerpo esté en el aire, similar a un puente
Mantenga esta posición durante cinco respiraciones estables y consistentes.
También se puede poner un bloque entre las rodillas mientras se realiza la pose.
Hala¯sana o postura del arado
Para personas con una tiroides hiperactiva se recomiendan posturas de yoga calmantes y reparadoras. Hala¯sana o la postura del arado estimula la zona abdominal y las glándulas tiroideas. También calma la mente, reduciendo el estrés y la fatiga.
Pasos para hacer la postura:
Acuéstese en el suelo sobre su espalda con los pies apoyados en el suelo. Coloque sus brazos a los lados y doble las rodillas para que sus pies están apoyados en el piso.
Ahora, levante lentamente las piernas desde las caderas. Coloque las manos sobre las caderas mientras las levanta y las usa como soporte.
Lentamente doble las piernas en las caderas y trate de tocar el suelo detrás de la cabeza con los dedos de los pies y estire sus manos para que estén bien apoyadas en el suelo.
Para volver a la posición acostad ruede suavemente la espalda en el suelo, respirando mientras usted baja el cuerpo.
Karnapidasana o postura rodillas a las orejas
Una postura que extiende la columna vertebral como karnapidasana puede ser un reto, especialmente si su columna vertebral no es fuerte. En esta postura, doble sólo en la medida que le sea cómodo. Por ello es importante que usted practique esta postura bajo la supervisión de un profesor de yoga cualificado.
Pasos para hacer la postura:
Partiendo de la postura del arado, doble las rodillas y llévelas al suelo a cada lado de la cabeza.
Descanse la parte superior de sus pies en el suelo. Mientras lo hace, deje que las rodillas apliquen una ligera presión en el oído.
Mantenga esta posición durante cinco respiraciones y suelte los brazos.
Padmasana o postura de la flor del loto
Los órganos de nuestro cuerpo están estrechamente relacionados entre sí. Un problema en un órgano puede afectar a otros órganos que se relacionan. Padmasana también, conocida como la postural del flor del loto, ayuda a que los órganos funcionen correctamente. La práctica de este tipo de posturas restitutivas ayudan a relajarnos, renovar y sanar el cuerpo.
Pasos para hacer la pose:
Sentarse en el suelo o sobre una colchoneta con las piernas estiradas hacia fuera delante de usted, manteniendo su columna vertebral erguida.
Ahora, doble su rodilla derecha y colóquela en el muslo izquierdo. Asegúrese de que la planta de los pies apuntan hacia arriba y que el talón esté cerca de su abdomen.
A continuación, con ambas piernas cruzadas y los pies colocados en los muslos opuestos, coloque sus manos sobre las rodillas en la posición de mudra (donde se unen el dedo índice y el pulgar, con los otros tres dedos apuntando hacia afuera).
Recuerde que debe mantener la cabeza recta y erguida la columna vertebral. Mantenga esta postura y continue con respiraciones largas suaves dentro y fuera.