Los cuadros de ansiedad o ergofobia (miedo irracional asociado inconscientemente al lugar del trabajo) son una de las principales causas de baja laboral. Afortunadamente, cada vez se normalizan más los temas sobre salud mental, por lo que volver al trabajo después de una baja por ansiedad es más llevadero en la actualidad que hace unos años.
No obstante, la naturaleza de la ansiedad, que de por sí genera sensación de no control y peligro, unida a los prejuicios sobre salud mental que todavía siguen presentes entre nosotros, hace difícil su recuperación y el hecho de incorporación al trabajo una vez termina la baja. Este post te ayudará a enfrentarte adaptativamente a volver al trabajo después de una baja por ansiedad.
¿Qué provoca ansiedad en el trabajo?
Ya hemos hablado en anteriores posts de lo que es la ansiedad. La ansiedad y el estrés son dos procesos que, aunque sean diferentes, suelen venir acompañados el uno del otro.El estrés es el proceso de activación de recursos desencadenado por la percepción de que los recursos disponibles no son suficientes para hacer frente a las demandas del ambiente.
La ansiedad, por su parte, es el proceso emocional que se activa cuando nuestro sistema percibe un potencial peligro. De ahí que estén tan relacionados: si yo siento que no tengo suficientes recursos para hacer frente a la situación, el posible peligro será que me echen, no valer para aquello para lo que he dedicado toda mi vida, etc.
El complejo de volver al trabajo después de una baja por ansiedad puede desarrollarse por varios desencadenantes externos:
Falta de comunicación o mensajes contradictorios entre compañeros y con superiores
Políticas de seguridad y salud escasas o inadecuadas
Poca participación en la toma de decisiones
Percepción de no control sobre el trabajo que se desempeña
Horarios rígidos y/o demandantes o roles en la empresa poco definidos Cuando esta ansiedad es muy intensa y persistente, puede desarrollar miedo al propio espacio de trabajo (ergofobia), generando ansiedad y conductas de escape cuando se está en la oficina o se piensa en que se tendrá que volver a ella.
Estos miedos pueden llegar a ser tan interferentes que acabemos teniendo pensamientos del tipo “quiero que me despidan” con tal de acabar con el sufrimiento. Esto, unido a una falta de recursos y herramientas para una gestión adaptativa de la misma, puede desencadenar sintomatología ansiosa y desgana de volver al trabajo después de una baja por ansiedad .
¿Qué hacer cuando tienes ansiedad en el trabajo?
Lo más importante es identificar qué desencadenantes te llevaron al cuadro de ansiedad en un primer lugar. Muchas veces, la ayuda de un profesional se hace imprescindible, dejándonos ayudar y guiar en la identificación de aquellos procesos o funciones que por la situación que estemos viviendo se han vuelto desadaptativos.Entenderlos, validarlos y trabajar sobre ellos para moldearlos y que no acaben explotando en forma de síntomas se hace imprescindible para que la ansiedad no acabe interfiriendo en nuestra vida laboral y, sobre todo, a volver al trabajo después de una baja por ansiedad.
Una vez identificado, es útil rodearte de los tuyos, tener claro cuáles son tus necesidades y cómo priorizarlas y mantenerte activado a través de actividades de ocio y de autocuidado.
Para conocer más estrategias de gestión de ansiedad en el trabajo visita nuestra entrada sobre ansiedad laboral.
¿Cuánto dura una baja por ansiedad?
Aunque la recuperación de un cuadro de ansiedad varía de unas personas a otras y depende tanto de factores internos como de otros que escapan a nuestro control, varios estudios establecen que volver al trabajo después de una baja por ansiedad suele tomar unos 20 días, incluso de 30 cuando existe diagnóstico de Trastorno de Ansiedad Generalizada.¿Cuándo debo incorporarme al trabajo después de una baja por ansiedad?
Volver al trabajo después de una baja por ansiedad depende de la decisión de tu médico/a de cabecera o médico/a de tu seguro laboral que esté llevando el caso. Aún con esto, la legislación vigente establece un tiempo máximo de 12 meses de baja laboral por ansiedad, pudiendo aumentar hasta 18 meses en casos de excepcionalidad si así lo decide el médico.¿Cómo volver al trabajo después de una baja por ansiedad?
Permítete sentir ansiedad
Volver al trabajo después de una baja por ansiedad, sobre todo cuando ésta es larga, es un gran disparador de miedos y de pensamientos que nos paralizan. Puede ser que aparezcan dudas sobre si se habrá hecho notable que somos prescindibles, sobre nuestra valía profesional, no poder volver a rendir cómo antes y un larguísimo etcétera.Este miedo es normal, seguramente adaptativo, puesto que hace que nos activemos, estemos alerta y por tanto preparados para la readaptación. Sin embargo, una mala gestión de la ansiedad puede provocarnos más malestar de cara a la salud mental.
Aceptar que tenemos miedo, sin juzgarnos ni castigarnos, observándolo y atendiendo al mensaje que nos transmite es imprescindible para la buena gestión del mismo. Esto no siempre es sencillo, pues implica un cambio de actitudes a un nivel muy profundo. Si crees que no puedes hacerlo solo/a, no dudes en ponerte en contacto con un profesional.
Vuelve a la rutina
Cuando vayas a volver al trabajo después de una baja por ansiedad, realiza un regreso paulatino para que el cambio no sea tan brusco y tu sistema nervioso autónomo (el encargado de las respuestas automáticas del cuerpo, también de las emocionales) se regule cuanto antes vale la pena organizarte en un horario previamente a la incorporación.Los días previos al inicio de la vuelta empieza a levantarte y acostarte a las horas a las que tendrás que hacerlo cuando te incorpores, encuentra huecos para hacer deporte, planifica actividades gratificantes que encajen en tu horario laboral, etc.
Las actividades de ocio y de autocuidado son imprescindibles para tener un buen estado de ánimo y estar motivados y activados para el día a día cuando la monotonía empieza a pesar y las preocupaciones crecen.
Ponte en contacto con compañeros de trabajo
Otra buena estrategia para empezar tu proceso de adaptación antes de volver al trabajo después de una baja por ansiedad es retomar el contacto con compañeros. Una llamada telefónica o un café servirán para demostrarnos que las cosas no han cambiado tanto, que la relación con ellos sigue siendo buena y para actualizarte de cambios y novedades que hayan ocurrido en la oficina desde que te fuiste.Que no te engañen los prejuicios
Todos nacemos y crecemos en sociedad, estructurada en base a una cultura. Existen normas sociales y valores que escapan a nuestro control consciente, pero que operan siempre que nos relacionamos con la realidad.Aunque vamos mejorando, hoy en día todavía existen muchos prejuicios en cuanto a salud mental y a productividad. Hacer como que no existen o no te importan solo agravan la ansiedad o la vergüenza (estás escapando en vez de exponerte) y, aunque a corto plazo hará que te sientas mejor, puede que a largo plazo te pase factura.
Hablar y reflexionar sobre ellos con gente cercana puede hacer que te sientas parte de un grupo, que te entiendan e ir con las emociones asociadas al prejuicio más procesadas. Puedes incluso crear un plan de acción: decidir a quién vas a contar lo que te ha pasado y a quién no, a quién vas a dar explicaciones, cómo vas a neutralizar comentarios o preguntas irrespetuosos, etc.
Empieza con calma
No intentes pasar del 0 al 100 desde el minuto uno. Permítete una vuelta progresiva y escalonada, en la medida de lo posible. Dependiendo de la relación que tengas con tus superiores, puedes plantearte pedirles empezar con media jornada o la mitad de trabajo desde casa al volver al trabajo después de una baja por ansiedad.La mejor solución para tratar la ansiedad
Con todo ello, es posible que te cueste afrontar el hecho de volver al trabajo después de una baja por ansiedad y que la gestión de la ansiedad se vuelva una tarea difícil. Si esto ocurre, pide ayuda, acude a un profesional que te facilite la comprensión de tu problema y te ayude a buscar soluciones.En Psicomaster contamos con un equipo de psicólogos en Madrid especializado en problemas de ansiedad y en trastornos adaptativos. Nuestros profesionales pueden ayudarte a gestionar la incorporación al trabajo de forma adaptativa, trabajando los disparadores que te llevaron en un primer lugar a esta situación. Si quieres saber más, contacta con nosotros. ¡Te esperamos!