Creo que todos hemos pasado alguna vez por esta situación. Llevas una rutina de ejercicios y una alimentación muy buena, te sientes contenta con tus resultados, pero algo pasa y tienes que parar esta rutina durante una breve temporada. Después muchas veces se hace muy difícil volver a coger el ritmo que tenías y empiezas a posponer “El lunes empiezo en serio”, creo que esta frase me la he oído decir a mí misma un centenar de veces. Volver a tu rutina de deporte puede ser difícil después de haberte tomado un “break” en esto. Prepara tu ropa de deporte de vuelta y tus deportivas porque es tiempo de volver a la rutina del deporte, es tiempo de volver a sentir confianza en ti misma y lo más importante, de disfrutar de una buena salud y un buen estado físico.
Aquí van unos pequeños consejos que espero te ayuden a dar el pequeño salto:
No seas dura contigo misma (o duro):
No te sientas mal, no te culpes a ti misma, todas hemos pasado por esta situación alguna vez. Si sigues constantemente culpándote por haber perdido tu rutina y te pones metas muy altas para volver a la carga lo único que conseguirás es frenar tus metas. Proponerte retos muy altos nada más empezar para recuperar todo en el menor tiempo posible solo te estarás perjudicando y frustrando. Deja de lado los malos pensamientos y la negatividad, disfruta de tu entrenamiento en el gimnasio o en casa y siéntete entusiasmada porque estás volviendo a caser quien eras y confía que poco a poco serás incluso más fuerte de lo queras antes.
Tomate tu reto con calma.
Asegurate que empiezas de a poco, es un proceso lento, no quieras matarte la primera semana. Tienes que disfrutar este camino. No importa si dejaste de hacer ejercicio porque te mudaste, porque estabas malo, porque te fuiste de vacaciones, etc. No mires al pasado y piensa como vas a entrenar a partir de ahora, cuantos días, que horas te gustan más, etc. No pretendas empezar por donde lo dejaste, quizás debes aflojar este nivel. Por ejemplo, si solías correr todos los días, empieza por caminar o reducir tu ruta. Poco a poco volverás a llegar a donde estabas. Si realizas ejercicios de pesas quizás también tengas que reducir las repeticiones o el peso de las mancuernas o los instrumentos que uses. No te olvides de estirar y calentar, te ayudará a no lastimarte y te ayudará a tener menos agujetas al día siguiente.
Planea, planea y planea.
No tiene sentido decir voy a empezar a hacer deporte y no llevar una pequeña organización al menos de que días piensas entrenar y qué piensas hacer. Tener una rutina de entrenamiento y tener las ideas claras de como vas a entrenar te hará tu camino más fácil.
Primero piensa en cuantos días a la semana quieres hacer deporte. Puedes bajarte plantillas en internet como “weekly planners” o simplemente dibujarte tu propio esquema en casa. Algo tan simple como esto también te mantendrá más motivada y con más ganas de cumplir tus retos.
Otro truco o consejo que ayuda es preparar todos tus utencillios y tu ropa para el día siguiente. Ten tu maleta preparada sobre todo si vas a ir al gimnasio por la mañana. Si puedes prepárate también el desayuno (por ejemplo tu mezcla de avena) para que ya tengas todo listo y solo tengas que saltar de la cama sin impedimentos por el camino.
Empieza con buen estado de ánimo.
Si odias entrenar, de nada te sirve empezar con mala cara o con pocas ganas. Mi mayor consejo es que elijas un deporte que de verdad te motive y que te haga disfrutar. Hay muchas maneras de que puedas entrenar, solo encuentra la forma que te haga más feliz. Si no disfrutas lo que haces terminarás dejándolo a un lado y tu esfuerzo habrá sido inútil. Si la anterior rutina que tenías no te gustaba, cambiala, encuentra una clase que te guste, un compañero de deporte o un plan de entrenamiento que disfrutes. Necesitas mantenerte fresca y motivada para poder alcanzar tus metas.
Encuentra tu motivación
Es importante no complicar las cosas más de lo que lo son. Haz las cosas sencillas y poco a poco vete añadiendo más metas a tu lista. Empieza entrenando menos veces y haz pequeños ejercicios que puedas superar y una vez te encuentres segura con esa rutina añádele un poco más de dificultad. Para conseguir el éxito y que tu rutina de ejercicios sea lo que esperabas necesitas cambiar tu forma de pensar. Muchas veces no estamos motivadas, no queremos entrenar pero pensamos que tenemos que hacerlo aunque no nos guste. Si no encuentras motivación no conseguirás nada. La clave es que los ejercicios que hagas se vayan introduciendo en tu vida como parte de tus hábitos. Enfócate en qué quieres conseguir, motívate de la manera que mejor te funcione. Una vez que sigues adelante y empiezas a ver resultados tu motivación irá aumentando poco a poco. Después no habrá quien te pare y te sentirás super orgullosa de ti misma.
Sigue adelante.
Cuando acabas de volver al ejercicio, los primeros días tu cuerpo se sentirá pesado y necesitará tiempo para volver a la forma que tenía antes. Depende de cuánto tiempo te tomaste de descanso te costará más o menos volver a donde estabas. Quizás tu forma física y tu musculatura se hayan reducido un poco. Los mejores ejercicios para volver a las andadas son aquellos enfocados en flexibilidad o cardio ligero. Hará que tu sangre vuelva a circular y te ayudará a introducirte mejor en el mundo del deporte una vez más. Ejercicios de yoga, caminatas ligeras o trote son muy recomendados para empezar. Pero recuerda, lo más importante es tomarte las cosas con calma, no quieres quemarte nada más empezar y sentirte reventada al día siguiente. Cada semana márchate pequeños logros para ir avanzando y no estancarte en la misma rutina.
Animo y suerte en tu vuelta a la rutina del deporte !!
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