Estos días de frío apetece estar en casa ¿verdad? Suerte que me he apuntado al gimnasio porque últimamente estoy poco tolerante a las bajas temperaturas y me afecta a toda la columna vertebral..¡es algo horrible!
Pues bien,si te pasa esto y te estas preparando para una carrera tienes que saber que la cinta puede servirte para entrenar.
No dejes que el frío,la lluvia o el viento te arruinen tus planes. Aunque la cinta no pueda ser muy recomendable para las carreras al aire libre debes saber que combinar los entrenamientos no es nada malo.
Es verdad que si la carrera es al aire libre, tus piernas se acostumbran al impacto y al impulso hacia delante durante los entrenamientos. También se adapta al terreno irregular,a ir contra el viento,al frío… Pero debemos tener en cuenta que lo mejor es evitar una lesión o que la calidad del entrenamiento no sea la deseada por culpa del tiempo.
Recomendación:
Si eres de los que prefiere entrenar en el gimnasio deberás encontrar una relación óptima entre las dos opciones, que vendría a ser: 50-60% en cinta y 40-50% al aire libre.
Por ejemplo,si tienes en tu entrenamiento días con trayectos cortos aprovecha a hacerlos en el gimnasio,pero si incluyes alguno largo intenta hacerlo al aire libre (aunque sea en horas donde el sol pueda calentar más) así tu cuerpo tendrá tiempo para mantenerse a una buena temperatura durante el entrenamiento.
Aprovéchate de la cinta y sus opciones;puedes variar la velocidad o la pendiente para hacer el entrenamiento más atractivo y a la vez más eficaz.
Hay muchas recomendaciones en las que explican que deberíamos correr siempre con un 2% de inclinación porque esto simula la carrera al aire libre. Pero esta práctica puede llevar a diferentes problemas como lo es el esguince en los tendones de Aquiles.
Una vez tengas que salir a la calle para entrenar a una temperatura muy baja se recomienda darse una ducha con agua templada antes de comenzar y vestirse a una temperatura de 10-15º más que la que hay en el exterior.
Intenta ponerte capas de ropa que puedas quitarte y que la más próxima a tu cuerpo sea muy transpirable para evitar la sensación de frío al quedarse la humedad en tu cuerpo.
La última capa puede ser una prenda que corte el viento; y no olvides proteger tus manos y la cabeza.
Puedes comenzar corriendo en contra del viento y volver a casa a favor;así evitarás congelarte al volver si corres contra el viento porque habrás sudado mucho.
Por último te aconsejo que no te exijas en estas épocas más de lo que tu cuerpo pueda aguantar, porque darás paso a la fatiga innecesaria pudiendo acortar, en este caso, algún entrenamiento.
Fuente: este post proviene de Fitness y Salud, donde puedes consultar el contenido original.
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