Todo médico considera que curar la enfermedad es su deber, y que con ello restablece el estado de salud, cuando lo que realmente logra es devolver el bienestar, así sea en forma temporal. Ya reaparecerá una sensación de malestar,
ligado a una enfermedad con sus síntomas presentes.
Si no perdonas por amor, perdona al menos por egoísmo, por tu propio bienestar.
Entonces, ¿qué es lo que buscamos?, ¿realmente buscamos salud? No, buscamos BIENESTAR.
El ser humano no puede buscar salud, la salud es un estado natural y se produce espontáneamente tanto en el cuerpo, como en la mente. Es la expresión del amor en la vida. La enfermedad es igualmente un estado que se da naturalmente, llega en aquellos momentos que requerimos de ella como una de las formas en que el amor se presenta firme e insondable.
No debemos creer demasiado en los elogios. La crítica a veces es muy necesaria.
Realmente lo que hacemos es balancear estos dos estados, salud ? enfermedad, en busca constante del tan anhelado bienestar. Esa sensación que se da como resultado de nuestra expresión como seres espirituales.
Se produce cuando actuamos con alegría y amor desde nuestro interior, cuando el gozo y la espontaneidad son el motor de nuestro quehacer. Se convierte el bienestar en un estado precioso.
¿Has sentido alguna vez que en medio de un dolor de espalda o cualquier otra dolencia te llegan momentos que se llenan de bienestar, de ánimo, y logras llevar a cabo tus actividades a buen término, así luego te reaparezca la dolencia previa?
Si deseas felicidad de los demás, sé compasivo. Si deseas tu propia felicidad, sé compasivo.
¿Tienes algún conocido con una enfermedad crónica y que va por la vida haciendo su labor, ?a pesar de ella?, como si nada? Eso es el bienestar en medio de la enfermedad, con la salud de fondo.
Recuerda que cuando tienes gripe, una enfermedad sencilla, aquello que logras con la medicación, no es la erradicación del virus o sea de la enfermedad, logras controlar los síntomas para sentirte bien, mientras en el fondo la enfermedad cura
espontáneamente en su ciclo natural.
¿Qué pasa con la diabetes o la tensión alta, la artritis o el cáncer? Sucede exactamente lo mismo, el individuo busca es el bienestar, que le alivien los síntomas, que el dolor desaparezca, mientras la enfermedad sigue su curso de por vida o se cura mediante la combinación de la capacidad auto-curativa del cuerpo y las
medidas ejercidas por la Medicina.
Lo esencial, el Bienestar.
Carlos Juan Antonio Toro Torres
Caminos del Cuerpo,
Voces del Corazón