Afortunadamente, hay más que agua para solucionar esto. Existen varios alimentos y bebidas que pueden ayudarte a rehidratarte.
Qué beber e ingerir, en caso de deshidratación
Agua de coco
Cuando estás deshidratada, tu cuerpo necesita más que solo líquidos para recuperar el equilibrio. En la mayoría de los casos, también debes reponer los electrolitos que se pierden en los líquidos corporales, como el sudor y la orina.Los electrolitos son minerales que tu cuerpo necesita para funciones importantes, como el equilibrio adecuado de líquidos y mantener el corazón latiendo a un ritmo regular. Algunos de las más comunes son:
Sodio
Calcio
Magnesio
Potasio
El agua de coco es excelente para beber cuando tienes deshidratación, ya que proporciona el agua que tanto necesitas y aporta electrolitos y algunos carbohidratos. También ayuda a prevenir los calambres musculares.
Por ejemplo, una porción de 1 taza (237 ml) de agua de coco sin azúcar contiene el 9% del valor diario de potasio y tiene 45 calorías.
Caldos y sopas
Al igual que el agua de coco, los caldos y las sopas aportan un alto contenido de agua y electrolitos. Esta combinación es clave en la rehidratación.Además, el caldo de huesos y otras sopas con proteína animal también proporcionan colágeno. Esta es una proteína de origen animal importante para la salud de las articulaciones, que puede ser especialmente importante si tu deshidratación se debe a un esfuerzo excesivo.
Sin embargo, el cuerpo también puede producir colágeno a partir de muchas otras fuentes de proteínas. Si estás preparando caldo de huesos en casa, ten en cuenta que cocinarlo durante más de 8 horas aumenta su contenido de calcio y magnesio. Estos minerales son importantes para los huesos y los músculos, respectivamente. Agregar diferentes verduras también aumenta los nutrientes.
Una porción de 1 taza (237 ml) de caldo de huesos de res, por ejemplo, contiene estos electrolitos:
Fósforo: 6% del VD
Potasio: 9% del VD
Sodio: 21% del VD
Si bien el sodio es un electrolito importante que debe reponerse cuando está tienes deshidratación, consumir demasiado se asocia con problemas cardíacos y presión arterial alta. Los expertos aconsejan limitar la ingesta de sodio a 1.500-2.300 mg por día.
Sandía y melón
Las frutas y verduras tienen un alto contenido de agua y pueden ser una excelente opción para mantenerte hidratada. Esto es especialmente cierto con frutas como la sandía y el melón. Todos estos tienen un contenido de agua muy alto, lo que los convierte en opciones estelares cuando tienes deshidratación.Una porción de 1 taza (152 gramos) de sandía cortada en cubitos, por ejemplo, es casi un 92% (139 ml) de agua. El melón es similar, con aproximadamente un 90% de contenido de agua en una porción determinada.
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Batidos
Los batidos son una forma altamente personalizable de consumir más líquidos cuando estás deshidratada. Por lo general, estos toman una base líquida, como leche, jugo o té helado sin azúcar, más un puñado de frutas y verduras y, a veces, yogur para agregar proteínas. También puedes utilizar leches de origen vegetal o proteínas en polvo, en lugar de lácteos.El resultado es una forma cremosa, dulce y refrescante de reponer los líquidos perdidos. Los batidos de bayas contienen mucha vitamina C, que es esencial para un sistema inmunológico saludable. Esto es especialmente importante si tu deshidratación se debe a fiebre o infección.
Leche
Un vaso de leche proporciona líquidos, proteínas, carbohidratos y algo de grasa. Es una buena opción para rehidratarse porque contiene muchos electrolitos útiles. Estos son algunos de los principales nutrientes que obtendrás en 245 ml de leche al 2%:Agua: 218 mL (89% por volumen)
Proteína: 8 gramos
Calcio: 24% de la VD
Potasio: 8% de la VD
También contiene una pequeña cantidad de sodio, el cual ayuda a tu cuerpo a retener más líquido. Un experimento en 72 hombres adultos encontró que tanto la leche entera como la descremada eran más hidratantes que el agua 3-4 horas después del consumo.
Esto se debe a que los nutrientes adicionales en la leche, como la lactosa, el sodio y el potasio, ayudan a tu cuerpo a disminuir la velocidad a la que absorbe los líquidos y la rapidez con que estos se excretan en la orina.
La leche es una buena opción si tienes poco apetito o náuseas. Bébela fría si estás especialmente sobrecalentada o úsela para reponer calorías y líquidos después de un entrenamiento.