Hola a todos y feliz año!! Espero que hayáis pasado unas vacaciones estupendas y hayáis difrutado con vuestros seres queridos. Supongo que ya todos hemos vuelto a la rutina y empezamos a tomar nuestros hábitos y a ponermos en forma de nuevo, pero estoy segura de que además de ello, muchos nos hemos fijado nuevos propósitos para el 2016, como mejorar nuestras glucemias, hacer más deporte o dejar de fumar y hoy os quiero hablar de este último propósito, ya que hay algunas formas que parecen muy eficaces para aquellos que no son capaces de dejarlo por su propia voluntad aunque se tengan unas ganas inmensas.
Cuando una persona fuma quiere dejar de fumar al instante, superando fácilmente la dependencia que tiene y sin notar que lo está dejando, pero esto es practicamente imposible. Por ello, aunque el 70% de los fumadores lo quiere dejar y lo ha dejado durante unos días, ha vuelto por los síntomas que produce el abandonar la adicción a la nicotina, como: mal humor, nervios, aumento de peso, sensibilidad, incluso, malestar físico o taquicardias.
Estos no deben ser excusa, ya que son pasajeros y con hábitos alimenticios adecuados y deporte se puede superar la dependencia que supone el tabaco. Lo principal es querer dejarlo con todas las fuerzas y en segundo lugar, saber que los cuatro primeros meses serán difíciles ya que en ocasiones son adicciones de muchos años.
¿Y si la voluntad no es suficiente?
Si la voluntad no es suficiente existen métodos que pueden ayudar al fumador, como acudir a un tabacólogo, hipnosis clínica o apostar por la acupuntura.
Tabacólogo: Este especialista te ayudará a reducir el tabaco de manera progresiva en base a tu dependecia física y psiquica y te dará medicamentos o sustitutos nicotínicos que ayuden a reducir la adicción. Además, durante la terapia el fumador cuenta con apoyo psicológico, lo cual lo hace mucho más sencillo. Son tratamientos a medida y muy eficaces cuando la dependecia al tabaco es muy fuerte.
Hipnosis clínica: Su éxito se basa en que se centra en el componente psicológico de la adicción, es decir en el hábito que tiene la persona a la hora de fumar y que es el más dificil de romper y superar, ya que el componente físico dura dos semana y tras él, el cuerpo no tiene esa necesidad de nicotina. Sin embargo su éxito se basa en el fuerte deseo de la persona en dejar de fumar, ya que la hipnosis al fin y al cabo intenta influenciar a nuestra mente reforzando pensamientos positivos y desechando aquellos que nos pueden hacer recaer.
Acupuntura: Aunque nunca he escuchado a nadie que deje de fumar con la acupuntura, si he podido leer en varias ocasiones que las sesiones de acupuntura sirven para reducir notablemente la ansiedad, haciendo este trance mucho más sencillo.
¿Qué le pasa a nuestro cuerpo cuando dejamos de fumar?
A los 20 minutos de dejar de fumar la presión arterial baja a su nivel normal,la frecuencia cardíaca baja a sus niveles normales, la temperatura de la smanos y pies aumenta hasta valores normales.
A las 8 horas desde el último cigarro la concentración de monóxido de carbono en sangre baja a su nivel normal, la concentración de oxígeno en la sangre se normaliza y el restante de nicotina que queda en tu cuerpo baja al 6,25%.
A las 24 horas disminuye el riesgo de sufrir infarto de miocardio y los niveles de ansiedad aumentan casi al máximo.
A los dos días de dejar de fumar las terminaciones nerviosas dañadas empiezan a regenerarse gracias a que se acustumbran a la ausencia de nicotina y tu sentidos del olfato y gusto se agudizan.
A los diez días la ansiedad desenfrenada por fumar se reducen a 2 episodios por día.
A los dos o tres semanas mejora la circulación, la función pulmonar aumenta hasta un 30%. la circulación sanguinea de tus encías vuelve a la normalidad y los síntomas de abstinencia temrinan.
A las ocho semanas la resistencia a la insulina se normaliza.
Desde el primer hasta el noveno mes disminuye la tos, la congestión nasal, la fatiga y la sensación de ahogo, además los cilios pulmonares vuelven a crecer y son capaces de manejar la mucosidad, manteniendo los pulmones limpios, evitando infecciones.
Un año después el riesgo de padecer insuficiencia cardíaca es un 50% menor que el de un fumador.
Cinco años después el riesgo de morir por una enfermedad cardíaca es igual al de los no fumadores, así como el riesgo de morir por enfermedad pulmonar disminuye a la mitad.
Diez años después el riesgo de morir por cáncer de pulmón es similar al de los no fumadores, así como los de boca, esófago, garganta y páncreas.
¿Cómo combatir la ansiedad?
En Runners cuentan algunos trucos que pueden ayudar cuando el nivel de ansiedad aumenta en los meses previos:
Comer 5 veces al día y retrasar unos minutos la comida desde el momento que se sienta hambre.
Alimentos con nutrientes relajantes: puñado de frutos secos, piña natural, plátano, copos de avena con leche, ensalada de lechuga.
Alimentos bajos en calorías para los momentos de crisis: chicles y caramelos sin azúcar, regaliz de palo, fresas, gajos de naranja, zanahoria, infusiones, yogures desnatados, refrescos light…
Prescindir de los excitantes: café, té, refrescos de cola… Resultan contraproducentes, y más si se toman ansiolíticos.
Además de todo ello los efectos contraproducentes de tabaco desaparecen y también el agravamiento de las complicaciones que podemos sufrir por vivir con diabetes. No esperes más y deja de fumar!! Siempre hay un buen momento :)
FUENTES: Runners, El Mundo, Salud Plus, Clarin, Psycloner.