Algunos de sus productos derivados es el aceite de ajo que también es usado tanto como ingrediente principal en la preparación de muchos platos y como un gran aliado para tratamientos de origen neumológico.
Los 6 beneficios del aceite de ajo que nadie te contó.
Beneficios del Ajo para la Salud
Además del particular sabor que hace destacar las comidas, el ajo posee una variedad extensa de propiedades para el organismo humano como:Excelente vasodilatador
Por ser rico en vitamina B ayuda a mantener los vasos sanguíneos dilatados y evita enfermedades como la aparición de trombos o de enfermedades coronarias.
Es un potente antibiótico
El ajo fortalece el sistema inmunológico previniéndolo de infecciones leves, gripes y resfriados. También ayuda a cicatrizar mejor las heridas.
Buen protector hepático
Por ser rico en vitaminas A, B y C no solo protege el hígado sino que lo ayuda a la hora de reducir sus niveles de grasa.
Es beneficioso para la piel
Sus propiedades antioxidantes ayudan a tener una piel saludable renovando sus células para mantenerlas suave y tersa. También funciona para combatir el acné.
Ayuda a mantener los niveles óptimos del colesterol
El ajo contiene alicina, una sustancia de gran beneficio para el sistema cardiovascular y que reduce los niveles de colesterol.
Descongestionante
Para los problemas pulmonares el ajo es el mejor aliado para los resfriados, bronquios llenos de flema o sinusitis. Además de descongestionante sus propiedades antibióticas son efectivas.
¿Cómo Favorece el Aceite de Ajo a las Enfermedades Bronco Pulmonares?
El 22% de la población española padece de alguna enfermedad pulmonar, siendo las mujeres las más propensas en padecerlo en cualquiera de sus edades.Es por eso que además de los tratamientos tradicionales, existen otras alternativas naturales como el aceite de ajo, ideales para combatir las afecciones bronco-pulmonares.
Es importante diferenciar el aceite de ajo culinario que no es más que ajo macerado en aceite de oliva, al aceite de ajo medicinal que se obtiene a través de la presión o decantación, lo que lo hace más puro y medicinal.
El aceite de ajo contienen selenio y germanio, dos sustancias difíciles de conseguir en los vegetales corrientes y que son beneficiosos para fortalecer el sistema inmunológico de infecciones.
Sus propiedades bactericidas hacen del aceite de ajo un medicamento natural eficaz para tratar enfermedades como bronquitis y hasta pulmonía. También ayuda a controlar procesos alérgicos, especialmente de origen nasal.
Pasos para Hacer Aceite de Ajo
Aunque existen formas más elaboradas para extraer un aceite de ajo más puro y con las menores alteraciones químicas posible, existen métodos caseros para obtener este producto y utilizarlo como remedio natural en las enfermedades bronco pulmonares.Aun así es importante consultar las opciones existentes de este producto, mientras tanto te ofrecemos una manera fácil de obtener aceite de ajo en tu propio hogar.
Para eso se utilizan ocho dientes de ajo fresco y dos tazas de aceite de oliva extra virgen, se trituran los ajos y se agregan con el aceite en un tarro. Después de cerrado herméticamente, se agita y después se enfría por cuatro días seguidos.
Por último se retiran los ajos y se mantiene ese aceite macerado en un lugar fresco y a temperatura ambiente.
¿Cómo Tomar el Aceite de Ajo?
A manera de prevención, el aceite de ajo puede tomarse una vez al día sobre todo en ayunas, para activar todos los beneficios mencionados anteriormente.Cuando existan enfermedades bronco-pulmonares, lo ideal es tomarlo de dos a tres veces al día a manera de jarabe expectorante y fluidificante. Recuerda que este tipo de remedio se usa en una etapa preventiva, en caso de que la enfermedad pase a un nivel crónico lo más recomendable es acudir a un especialista.
Mientras tanto mantén tu tarro de aceite de ajo a mano y disfruta de sus maravillosas bondades casi milagrosas que te ayudarán a una sanación holística de tu organismo.