Receta:
250 gramos de harina de trigo integral (2 tazas aproximadamente)
50 gramos de linaza molida o salvado de trigo
10 gramos de sal marina
20 gramos azúcar moreno
10 gramos de levadura fresca (aproximadamente 1 cucharada)
40 gramos de mantequilla sin sal (al ambiente)
1 ½ taza de leche
1 yema para pincelar
Procedimiento:
En un bowl grande colocar la harina integral y mezclar los ingredientes secos. En el medio, colocar la levadura y mezclar junto con la leche y la mantequilla hasta conseguir una masa suave y elástica. Luego amasar por 10 minutos.
Al terminar, colocar la masa nuevamente en un bowl y cubrirla con papel film durante una hora en un lugar cálido. Pasado el tiempo, colocar la masa en un mesón ligeramente enharinado y apretar la masa con las manos o hundir el puño en ella (se golpea ligeramente con los nudillos, se amasa o se dobla) para quitarle todo el aire en el proceso del levado.
Una vez hecho esto se hacen bolitas de 50 gramos y de ésta sacar otra bolita de unos 10 gramos aproximadamente. Hacer un hueco en la bolita grande y poner la bolita pequeña dentro (esto es opcional, es sólo una manera de darle forma a los pancitos).
Colocar en una lata engrasada previamente y pintar cada pan con la yema de huevo, esto le dará un acabado brilloso y dorado en la parte superior (o prueba poniéndoles semillas de ajonjolí encima wohoo!) Hornear a fuego bajo, a unos 160° hasta que estén dorados y ¡listo!