Esta enfermedad comúnmente se produce como resultado de la osteoartritis u otra enfermedad que produzca desgaste del cartílago. La formación de estos espolones óseos se manifiesta con frecuencia después de los 60 años. Sin embargo, personas más jóvenes también pueden desarrollar osteofitosis.
Una persona con osteofitosis puede presentar dolor en las articulaciones o aflicción por un mal movimiento. Los síntomas de osteofitosis y artrosis son parecidos y difíciles de diferenciar. Esta condición se produce generalmente en el talón y pueden ser muy doloroso cuando entran en contacto con el nervio o si existe alguna presión sobre ellos.
Síntomas de la osteofitosis
En la mayoría de los casos, estos espolones óseos son pequeños y no suelen causar dolor. Pueden ser notorios si se forman alrededor de las articulaciones de los dedos y presentarán “dedos anudados”. Las personas jóvenes no experimentan síntomas de osteofitosis dolorosa, pero mayores de 60 años se pueden manifestar trastornos intensos, que incluso, puede requerir atención médica.Cuando los osteofitos se forman en las rodillas, el paciente puede experimentar dolor al estirar la rodilla. Si se forma en el hombro, puede irritar el manguito de los rotadores, causando dolor e hinchazón en la zona. Los espolones óseos en la cadera también puede causar dolor y limitar los movimientos.
Pero, la zona más común para el crecimiento del espolón óseo es la columna vertebral. Si los osteofitos se forman en el interior de una vértebra, puede ejercer presión sobre la médula espinal o las raíces nerviosas. En este caso el dolor será tan intenso que causará entumecimiento en la espalda, los brazos y las piernas.
Diagnóstico de espolones óseos
Para detectar la presencia de osteofitos, el paciente debe someterse a estudios que incluyen una IRM o EMGImagen de resonancia magnética (IRM). Muestra secciones transversales de los tejidos blandos y los huesos. Este método no utiliza radiación y tiende a revelar con más detalles los posibles daños a los tejidos blandos, como los discos de la columna vertebral, en comparación con rayos X o una tomografía.
Si el resultado de la IRM coincide con los síntomas del paciente, entonces eso puede ser todo lo que se necesita para el diagnóstico. Pero esto no siempre sucede y se deben seguir realizando estudios sobre el paciente.
Prueba de electrodiagnóstico. Si los síntomas persisten, se debe realizar un estudio de conducción nerviosa para evaluar la actividad eléctrica de los nervios. Seguidamente se recomienda realizar un electromiograma (EMG) para observar la actividad eléctrica de los músculos.
Con un electromiograma se puede determinar la ubicación del nervio que está experimentando un problema.
También se pueden hacer otros estudios y pruebas de imagen más avanzados, pero son menos comunes. Por ejemplo, un potencial evocado somatosensorial (PESS), que puede ayudar a determinar si la médula espinal está presentando problemas.
Causas de la osteofitosis
Los osteofitos pueden surgir en cualquier hueso, causado por sobrecargas o enfermedades de los huesos como la osteoartritis. Comúnmente surgen en las articulaciones más utilizadas, como: las rodillas, manos, columna y hombros. Un tipo frecuente de espolones óseos es el que produce en el talón causado por la osteofitosis de espolón calcáneo.
La causa más común de espolones óseos es la artrosis, debido a que esta condición desgasta el cartílago que amortigua los extremos de los huesos. Se desarrolla comúnmente en adultos mayores, pero puede comenzar antes si la articulación ha sufrido lesiones de tipo deportiva, accidental o cualquier otro origen.
El cartílago es un tejido flexible que conecta y amortigua los huesos en las articulaciones. Cuando este sufre desgaste, el cuerpo intenta repararlo y en consecuencia emerge un nuevo material óseo en forma de espolones.
En el caso de la columna vertebral, los discos amortiguan cada vertebra y por ello sufren desgaste (degeneración de disco), con el tiempo se vuelven delgados. Esta es la razón del por qué la columna es susceptible a formar espolones óseos.
El desarrollo de los osteofitos también puede estar influenciado por factores como:
Nutrición inapropiada
Problemas en la estructura ósea desde el nacimiento
Malas posturas
¿Qué complicaciones se pueden presentar?
Cuando los osteofitos se desprenden del hueso se convierten en un cuerpo libre. Estos quedan “flotando” alrededor de la articulación o pueden incrustarse en el revestimiento de la misma. En otros casos se desplazan entre los huesos pudiendo causar bloqueos intermitentes.Tratamiento de la osteofitosis en la columna vertebral
Si se experimenta dolor en la columna vertebral, como resultado de espolones óseos, se deben considerar diversas opciones de tratamiento.
El tratamiento de espolones óseos en la columna depende de la causa o los síntomas, pero en general suele ser conservador. El médico tratante puede recomendar al paciente:
Bajar de peso para aliviar el estrés en la columna vertebral
Estirar completamente el área afectad
Mejorar la postura o tener una postura consciente, para mantener la columna correctamente alineada
Hacer ejercicios para el fortalecimiento del cuello o espalda
Las técnicas para el control del dolor y aliviar los síntomas causados por osteofitosis, pueden incluir:
Inyecciones de cortisona. Cuando se aplica en las articulaciones, reduce la inflamación y esto alivia el dolor
Administración controlada de medicamentos: antiinflamatorios, relajantes musculares o analgésicos
Terapia de temperatura, aplicando calor o compresas de hielo en la zona afectada
Guardar reposo por el tiempo que el médico tratante considere necesario
Tratamiento natural para osteofitosis:
fisioterapia
reflexología o terapia zonal, para estimular las articulaciones que tienen espolones óseos
acupuntura
tratamiento homeopático
luz polarizada
Intervención quirúrgica
Si el dolor no desaparece con los tratamientos antes expuestos, el especialista puede considerar una intervención con láser. Este procedimiento de columna es ambulatorio y poco invasivo, donde se identifica la ubicación exacta del espolón óseo y se extrae cuidadosamente.La cirugía con láser no requiere de una larga hospitalización. La recuperación es muy rápida; en pocas horas el paciente podrá levantarse y caminar.
Factores de riesgo de padecer osteofitosis
El envejecimiento es el mayor factor de riesgo para padecer de espolones óseos. Al llegar a la edad del adulto mayor, todas las articulaciones han sufrido desgaste, incluso sin lesiones obvias.También están en riesgo aquellas personas que nacieron con problemas en la estructura de la columna, como escoliosis. Una mala postura puede conducir a espolones óseos.
El factor hereditario siempre está presente. Si uno de los padres del paciente sufre de osteofitos, las probabilidades de heredarlo aumentan considerablemente.
Recomendaciones generales
Si presentas dolor o rigidez en una articulación por más de dos días, debes consultar al médico. Podría ser por causa de espolones óseos. Un diagnostico precoz e iniciar un tratamiento a tiempo, puede mitigar el daño en la zona.El dolor y la inflamación en una articulación puede disminuir aplicando hielo y guardando reposo, si aun así, los síntomas continúan puede existir la posibilidad de estar padeciendo osteofitosis.
También puedes reducir el dolor siguiendo estas recomendaciones:
Debes perder peso. El sobrepeso exige una carga extra sobre tus articulaciones
Utiliza la fisioterapia para ejercitar y fortalecer los músculos alrededor de la articulación con el fin de estabilizarla
Utiliza zapatos que ofrezcan un buen soporte para amortiguar el impacto en las articulaciones
Mantén una postura consiente al sentarte o estar de pie. Una posición correcta ayudara a preservar la fuerza en la espalda y mantiene la columna alineada.
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