La metrorragia se refiere al sangrado del útero entre los períodos menstruales. Este es un problema común, especialmente para las adolescentes y las mujeres que se acercan a la menopausia.
¿Cómo ocurre la metrorragia?
Existen muchas razones por las que las mujeres pueden tener metrorragia. Estas son:
Desequilibrio hormonal (el desequilibrio a veces es causado por el uso inapropiado de medicamentos con hormonas, como las píldoras anticonceptivas)
Pólipos, que son crecimientos en el cuello uterino (abertura del útero) o dentro del útero; los pólipos generalmente son no cancerosos.
Fibromas, que son crecimientos no cancerosos en el útero.
Infección o inflamación del útero, cuello del útero o vagina.
Erosión del cuello del útero (pérdida de la piel de la superficie del cuello uterino)
Uso de un DIU (dispositivo intrauterino) o píldoras anticonceptivas
Endometriosis (Tejido uterino que crece fuera del útero)
Adherencias (tejido cicatricial) en el interior del útero
Paredes vaginales secas, a partir de la disminución de estrógeno después de la menopausia
Problemas médicos crónicos (por ejemplo, problemas de tiroides, problemas de diabetes y de coagulación sanguínea)
Algunos medicamentos, como los anticoagulantes
Estrés
El cáncer del cuello uterino o de otras partes del útero y la vagina
¿Cómo se diagnostica la metrorragia?
Tú médico te preguntará sobre tu historia clínica y ciclos menstruales, te puede pedir que lleves un diario del sangrado y los días en que no sangras, indicando qué tan fuerte fue el sangrado. También tendrás un examen físico.
Es posible que necesites realizarte un examen o procedimiento, tales como:
Biopsia de endometrio: tu médico toma una muestra de tejido del interior del útero. El tejido se examina bajo un microscopio en el laboratorio.
Ecografía: se usan ondas sonoras para obtener imágenes del útero, los ovarios y la pelvis. La sonda de ultrasonido puede ser colocada en la parte inferior del abdomen o en la vagina.
Sonohisterograma: un ultrasonido que se realiza después de que inyectar un fluido a través de un tubo en el útero. Este procedimiento permite detectar problemas con el revestimiento del útero.
Histeroscopia: tu médico insertará un tubo metálico delgado con una luz y una pequeña cámara a través de la vagina, el cuello uterino y dentro del útero. Esto le permite ver el interior del útero.
Histerosalpingografía: se inserta colorante en las trompas de Falopio y el útero a través del cuello uterino. Después se toman los rayos X. La tintura permite ver la forma y el tamaño del útero y las trompas.
Muchos de estos procedimientos se pueden realizar en el consultorio de tu médico. Otros se deben hacer en una clínica ambulatoria.
¿Cómo se trata la metrorragia?
El tratamiento depende de la causa del problema. Por ejemplo, si tienes un desequilibrio hormonal, tu profesional médico te puede recetar hormonas. Si un DIU está causando el problema, el mismo será retirado. La erosión del cuello del útero se puede tratar mediante la eliminación o destrucción de parte del tejido cervical.
A veces es necesaria la cirugía, los posibles tratamientos quirúrgicos son:
D y C: en la que el tejido se raspa o succiona el útero
Histeroscopia: para extirpar un pólipo, por ejemplo
Histerectomía: es la extirpación del útero
Si se diagnostica el cáncer, este se puede tratar con cirugía, radiación o quimioterapia (medicamentos contra el cáncer), o cualquier combinación de estos tratamientos.
¿Cuánto tiempo duran los efectos?
El tiempo que dure el sangrado entre períodos depende de la causa y el tratamiento.
¿Cómo puedes cuidar de ti misma?
Si tienes sangrado vaginal entre períodos durante 2 meses seguidos, llama a tu médico. Hazlo de inmediato si tienes sangrado o dolor intenso.
Siga el tratamiento recomendado por tu médico.