La meditación para niños y especialmente si se trata de mindfulness o atención plena, es una herramienta de gran poder para hacer comprender a los más jóvenes, que estar aquí y ahora, facilita mucho la sana expresión de sus emociones y las relaciones con la vida y con quienes les rodean.
La práctica de la meditación y especialmente si está centrada en el trabajo con niños y niñas, es un buen método que debería implementarse cuanto antes en las escuelas y centros educativos de toda índole.
Al hablar de meditación para niños, en ningún momento se hace referencia a cualquier término o actitud religiosa, sino al encuentro y desde el juego con el interior de cada uno de los niños y niñas con los que tratas habitualmente.
La práctica no sólo del silencio consciente, sino de la atención en todo aquello que se hace en el aquí y ahora, supone para los niños, el descubrimiento de un juego que les facilita mucho su relación con el mundo que les rodea y con las personas que comparten su día a día.
La meditación para niños, está ya siendo objeto de diversos programas en las escuelas que están ya dando muy buenos resultados y que tienen como beneficio una clara mejora de la atención en clase y en su vida diaria, una mejor relación con los compañeros y compañeras al trabajarse la compasión de un modo diferente, la empatía y la mejora de los casos de conflictos entre ellos o con sus mayores.
En muchos casos, los niños tienen dificultad para canalizar y expresar sus emociones, lo que tiene por consecuencia, problemas a la hora, no sólo de convivir con los demás, sino de enfrentarse con seguridad a su mundo interior.
Cuando se trabaja con ejercicios de meditación para niños, estos van entendiendo, a través del juego, que hay otras formas naturales de convivir, de expresarse, de contactar con los demás y de gestionar sus propias emociones para saber canalizarlas y expresarlas de una manera consciente.
Los niños y niñas son propensos a ejercer una desmesurada presión cuando reciben demasiada exigencia por parte de sus progenitores y/o profesores, por lo que al trabajar con la meditación para niños, una primera parte de práctica anti estrés es muy beneficiosa.
Por poner un pequeño ejemplo, quiero que en este momento te pongas de pie, aprietes fuerte los puños, te tenses como si fueses a estallar en un grito y trates de respirar. ¿Qué es lo que ocurre?
Ahora y todavía de pie, suelta los puños, deja caer tus brazos de forma natural a lo largo del cuerpo, haz un par de respiraciones profundas y ahora respira con normalidad y fíjate en el movimiento de esa respiración. ¿Qué es lo que ocurre?.
Como habrás podido observar, en la primera parte de este ejercicio, has tenido una mayor dificultad para respirar con normalidad, pues tu cuerpo estaba completamente tensionado. En el segundo caso, has podido respirar con más facilidad al tender a una cierta relajación. Pues al hablar de meditación para niños, imagina lo que ellos pueden estar pasando cuando se sienten tremendamente estresados y no saben muy bien cómo pueden canalizar esas emociones que les embargan y esas excesivas responsabilidades que se les ponen sobre sus hombros.
El trabajo de la meditación para niños, por ejemplo se viene haciendo con éxito desde la Escuela Española de Desarrollo Transpersonal que ya desarrolla programas en algunas escuelas, y puedes ver también otras prácticas en Educación 3.0 y en este programa que se ha llevado a cabo en Colombia y que trata de la relación entre educación y respiración
Para poder trabajar con los niños en casa, te propongo los ejercicios que podrás encontrar en el libro de Fina Sanz "tranquilos y atentos como una rana" y en el que encontrarás un buen material para trabajar la meditación para niños.
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