Los celos son una de las fuentes de conflicto más habituales en las relaciones de pareja. Esto se debe al sentimiento que tenemos de posesión que forma parte de nuestra cultura. Nos informan de un hecho importante, creyendo que podemos perder a la otra persona. Esta situación nos pone alerta acerca de que existe un peligro, el de perder el cariñó y la atención que nos ofrece nuestra pareja, en favor de otra persona.
En las relaciones de pareja se reflejan todos nuestros miedos, nuestras carencias y las dificultades que no hemos logrado superar. Dos personas se encuentran con todo su repertorio de experiencias y aprendizajes para ponerlos en común. Si las relaciones entre personas ya de sí son complicadas, en la pareja suponen una mayor complejidad. La intimidad queda expuesta y así nos vemos vulnerables ante la otra persona.
PublicCO/Pixabay
En la convivencia chocan entre sí las ideas, las conductas y las distintas motivaciones. Es, sin duda, una excelente prueba para considerar la importancia que tiene la otra persona para nosotros. Para lograr un consenso y un bienestar común es necesario ceder de forma conjunta, para mirar por la pareja más que por uno mismo. Hay factores que son pilares básicos para fortalecer la relación de pareja y que pueda mantenerse en el tiempo de forma satisfactoria. Entre ellos, destacan la confianza y el respeto. Estos dos elementos básicos ayudarán a que los celos no se conviertan en una fuente de eternos conflictos, en los que el sufrimiento será constante.
¿Qué suponen los celos en la relación de pareja?
¿Alguna vez has pensado que los celos de tu pareja eran una demostración de amor? Si es así, es necesario que sepas que esto es una gran equivocación. Los celos en ningún caso forman parte del amor. Los celos son una muestra más bien de inseguridad de intranquilidad y de falta de reforzamiento en el vínculo. También tienen que ver mucho con la persona que los experimenta, ya que puede estar pasando por un mal momento y se vea más inseguro en la relación.
También hay que decir que hay celos totalmente justificados, en los que la otra persona claramente está dando de lado, dejando de prestar atención, o haciendo ciertas cosas en la relación que no han sido habladas, ni consensuadas ni permitidas por ambos integrantes.
Cocoparisien/Pixabay
Los celos en la relación de pareja son una gran fuente de información, ya que pueden estar aportándonos señales muy valiosas. Dependiendo de ante qué situaciones aparezcan, de la intensidad y la frecuencia, estas son algunas de las situaciones más comunes:
- Falta de comunicación y de intimidad: cuando falla la comunicación y las personas están distanciadas, se comparten menos experiencias, y es fácil que aparezcan celos por una u otra parte, o por ambas.
- Carácter posesivo y dependiente: Hay ciertas personalidades que son más celosas que otras, y las personas que tienen más carencias y falta de atención, son las que más se preocupan por lo que pueda estar haciendo su pareja con otras personas. Si además tienen baja autoestima creerán ellos mismos que no son lo suficiente buenos o tienen la suficiente importancia para su pareja. Estas personas si no logran solucionar sus conflictos tienen una mayor predisposición a ser posesivos y dependientes.
- Indiferencia y falta de motivación: esto es un gran indicativo de crisis, el vínculo se está viendo debilitado. Y es el momento de hablar acerca de lo que está ocurriendo y de una posible desvinculación, si ya no hay interés ni motivación. Cuando esto le ocurre a una de las personas, la otra tiende a pensar que está así porque hay otras personas de por medio, lo que acaba convirtiéndose en celos.
Puede que algo esté dejando de funcionar en tu relación de pareja, y es a lo que debes de atender. Cuando aparece la desconfianza, tienes que profundizar en el por qué, ver lo que se puede solucionar y lo que forma parte de ti. Sobre todo dar la oportunidad de que haya comunicación para no imaginar más de lo que está pasando, y poner las cosas claras. Es la mejor forma de evaluar si lo que está ocurriendo forma parte de ti, por cómo te encuentras tú, forma parte de una debilitación en el vínculo con tu pareja, o es que tu pareja ha decidido abandonar la relación y las muestras son claras y visibles. En cada caso las vías de actuación son diferentes.
Dejar de sufrir a causa de los celos
Cuando la situación causante de los celos ha sido hablada y consensuada, la relación va adquiriendo nuevas habilidades de comunicación y se va reforzando. Hay personas también que están sufriendo constantemente por el tema de los celos, y es algo que se repite a lo largo de su vida. Esto tiene más que ver con la personalidad, quienes tienen un carácter más posesivo, si se le une la falta de autoestima, la combinación está destinada a la frustración y el malestar. Esto tendría más que ver con uno mismo.Komposita/Pixabay
Las personas que sufren continuamente a causa de los celos, o bien van cambiando de pareja, o se acomodan con una a la que restringen y le guían sobre lo que puede y lo que no puede hacer, cohibiendo totalmente su libertad. Además, el sufrimiento por los celos hace que la persona que los sufre se convierta en un controlador nato, espiando y violando la intimidad de la otra persona. Esto es algo que destruye el amor, generando desconfianza y conflicto. En palabras de Krishnamurti: “Conoceremos el estado del amor solo cuando los celos, la envidia, la posesión y el dominio terminen. Mientras haya posesión, no hay amor.”
La meditación o mindfulness es una práctica importante y necesaria para liberar a la mente de este conflicto interno. La persona con una personalidad celosa necesita liberarse de este tipo de pensamientos, y adquirir un autoconocimiento que le permita sentirse valioso y querido. Enfocar la atención hacia uno mismo, acerca de cómo se está autodestruyendo, es imprescindible para terminar con el sufrimiento. La meditación nos aporta las claves para calmar nuestra mente, y que dejemos de aferrarnos a la posesión y el apego que son la fuente de todo nuestro malestar.
No se trata de eliminar la emoción de los celos, se trata de transformarla en algo constructivo, para alejarse de los celos transformados en sentimiento o pasión que son los que acaban por convertirse en patológicos (celotipia). Para cualquier tipo de relación que mantengamos esto va a ser fundamental. En una relación de pareja, para que el vínculo sea sano ha de estar alejado de este tipo de celos destructivos que se convierten en algo peligroso.
En conclusión, cada vez más expertos del mundo de la medicina y la psicología insisten en la importancia de cuidar de nuestra mente, tal y como propone el método Crear Salud.
Debemos ser conscientes de que para llevar una vida saludable también necesitamos nutrirnos adecuadamente y activarnos haciendo cosas que aporten a nuestro bienestar integral. Herramientas como la app Siente – que puedes descargarte aquí – pueden ser grandes aliadas en tu camino a una vida libre de estrés. Su metodología es sencilla de usar, pues incluye el mindfulness y la psicología positiva para mejorar tu bienestar, reducir el estrés y, en consecuencia, ser más feliz.