Las 4 Leyes de la Espiritualidad de la India, nos indican, con gran sabiduría, que todo está ya programado para que comprendamos una determinada lección en la vida o pasemos a la siguiente.
Quizás esto último te pueda parecer que no es así, pero te puedo asegurar que si empiezas a aplicarlas a tu vida, darás un gran paso para conectar contigo mismo y encontrar la paz interior.
Las cuatro leyes de la espiritualidad hindú.
La primera ley de la espiritualidad nos dice: La persona que llega es la persona correcta - ¡Compártelo!
La persona que llegan a nuestras vidas no aparecen por casualidad, todas las personas que nos rodean, que se relacionan con nosotros, están aquí a nuestro alrededor por algo, para hacernos aprender y avanzar en cada situación concreta. Incluso las personas que nos hacen daño, o con las que no conectamos, están por un motivo. Nuestra evolución espiritual depende de como afrontemos nuestras relaciones con todos los que nos rodean. Unos serán para nosotros faros en el camino que trazamos en nuestra existencia y otros quizás nos señalen zonas oscuras por las que no deberíamos transitar. Todos, nos aportan algo.
Tenemos que ir aprendiendo de cada relación, somos una suma de aprendizajes que conforman nuestro destino. Y cada persona con la que intercambiamos nuestra energía, un maestro. Aprendamos de ellos. Nunca dejemos de aprender.
Cada situación tiene un aprendizaje que llevará tiempo asumir.Con el tiempo sabremos agradecer las piedras que encontramos en nuestra vida porque todas suman algún tipo de aprendizaje, están ahí por algo.
Cada persona que pasa por nuestra vida es única. Siempre deja un poco de sí y se lleva un poco de nosotros. Habrá los que se llevan mucho pero, no habrá quien no deje nada. Esta es la prueba evidente de que dos almas no se encuentran por casualidad.
Jorge Luis Borges
El segundo principio espiritual indica: Lo que sucede es la única cosa que podía haber sucedido - ¡Compártelo!
Nada de lo que nos sucede en nuestras vidas podría haber ocurrido de otra manera. Ni siquiera el detalle más insignificante podría haber fluido de otra forma. Lo que ocurrió solo pudo pasar de esa manera, y tuvo que haber sido así para que aprendiésemos esa lección y siguiésemos adelante en nuestro camino espiritual y vital.
Todas y cada una de las situaciones que nos suceden en nuestras vidas son perfectas para nuestro crecimiento interior, aunque nos resistamos a través de nuestro poderoso ego y nuestra mente se resista y no lo acepte.
Apartemos de nuestra cabeza pensamientos como: “su hubiera hecho tal cosa”… lo que hiciste era lo que necesitabas, no te regodees en el error pasado, en lo que pudo haber sido y no fue. Deja de hacerte la víctima. Aparta de tu cabeza la pregunta del por qué e introduce el para qué. El enfoque es completamente distinto, tu vida se lo merece. Simplemente agradece esa enseñanza a la vida, a Dios o al Universo, a quién tu desees.
Cuando algo no sale como planeamos o visualizamos simplemente debemos agradecer porque es aprendizaje necesario y preguntarnos qué la vida quería que aprendiéramos de esa situación, en vez de por qué. Así sabremos que todo lo que está debajo del cielo tiene su momento y su lugar y que lo sucedido fue perfecto. No hay otra opción.
La tercera de leyes de la espiritualidad india nos dice:En cualquier momento que comience es el momento correcto - ¡Compártelo!
Las circunstancias, hechos, acciones que desarrollamos, empiezan en el momento justo, ni antes, ni después. Cuando estamos preparados para que algo nuevo empiece en nuestras vidas, es en ese preciso instante cuando comenzará. Dejemos de pensar en lo que pudimos hacer y no hicimos. En aquél momento era lo correcto, pasase lo que pasase.
Si conseguimos mantener la actitud y humildad de saber que todo ocurre en el instante que debe ser y no cuando nosotros queremos que ocurra, daremos un paso de gigante en nuestro camino. Mientras ocurre, disfrutemos lo que tenemos, disfrutemos del momento presente. Aceptemos.
Aquietar nuestra mente de ruido externo es fundamental para la aceptación, te recomiendo la lectura de nuestra guía de atención plena y la guía de meditación para principiantes. Te ayudarán a evitar que tu mente viaje constantemente del presente al pasado y al futuro. Así podremos disfrutar de lo que está ocurriendo.
La cuarta ley de la espiritualidad hindú nos dice:Cuando algo termina, termina - ¡Compártelo!
Si algo termina en nuestra vida, es para para permitir e impulsar nuestra evolución, por lo tanto es mejor no mirar atrás, seguir adelante y avanzar con esa experiencia ya en nuestra mochila vital. Muchas veces intentamos alargar algo, deteniendo de esta forma nuestra vida.Seguir adelante es la mejor manera de no sufrir y enriquecerse. Dejemos que vuele lejos de nosotros aquello que terminó. Si no es así, volverá a nuestra vida. Si has leído la leyenda japonesa del hilo rojo del destino sabrás de que estoy hablando.
Si somos capaces de aplicar estos sencillos mandamientos en nuestro día a día, seremos capaces de llevar una vida más coherente y mucho más propicia para alcanzar la felicidad.
Me gustaría acabar, añadiendo que no es casual que estemos leyendo esto ¿no crees? Al menos merece que le demos un par de vueltas… y si pasamos a la acción mucho mejor. Espero sinceramente que este artículo haya sacudido vuestra vida como vuestro alma.
¡Que tengas un día maravilloso!
Namasté 🙏 (¿Conoces el bonito significado de esta palabra?)
PD.- Para los que sois más de videos os dejo este que seguro os agradara ver las cuatro leyes de la espiritualidad hindú en vuestro formato…
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