La ?cervecita? del aperitivo, a pesar de la mala fama que tiene por lo de la ?tripita cervecera?, consumida con moderación es un alimento que aporta muchos beneficios al organismo y está buenísima.
Os cuento algunas de sus propiedades:
· Menor riesgo de enfermedades cardiovasculares: La cerveza contiene vitamina B6, que nos protege contra las enfermedades cardiacas mediante la prevención de la acumulación de un compuesto llamado homocisteína. La cerveza previene la formación de coágulos, que causan bloqueos en las arterias coronarias. El consumo moderado de cerveza también reduce el riesgo de aterosclerosis.
De hecho, el estudio realizado en 2011?Cerveza, Dieta Mediterránea y enfermedad cardiovascular? realizado por el Hospital Clínic, las Universidades de Barcelona y Málaga, y el Instituto de Salud Carlos III, entre otras instituciones, concluía que el consumo moderado de cerveza produce efectos positivos en relación con las enfermedades cardiovasculares.
· El aumento de la densidad ósea: Esta demostrado que el consumo moderado de cerveza aumenta la densidad ósea, previniendo el riesgo de fracturas y osteoporosis.
· Sistema digestivo: la cerveza posee una serie de propiedades digestivas, entre las que se incluyen, la estimulación de gastrina, del ácido gástrico, y de las enzimas pancreáticas.
· Anti-envejecimiento: La cerveza tiene la capacidad de aumentar la potencia de la vitamina E que es un importante antioxidante del cuerpo, además de ser vital en el mantenimiento de una piel sana y de contribuir a ?frenar? el proceso de envejecimiento.
· Prevención de la anemia: es una buena fuente de vitamina B12 y de ácido fólico, la deficiencia de los cuales pueden conducirnos a la anemia. La vitamina B12 es esencial para mantener un normal crecimiento, buena memoria y concentración.
· Cálculos renales y osteoporosis: La cerveza contiene un alto porcentaje de potasio y un bajo contenido en sodio. Es una rica fuente de magnesio que se traduce en un menor riesgo de cálculos renales. El silicio presente en la cerveza se absorbe fácilmente por el cuerpo, esto explica el efecto protector de la cerveza contra la osteoporosis.
· Recuperación tras un esfuerzo deportivo: según estudio publicado en "International Journal of Sport Nutrition and Exercise", tras realizar ejercicio moderado una cerveza baja en alcohol contribuye a la recuperación del organismo.
La opción más saludable es la baja en alcohol, ?light? o ?0:0?, pero tampoco hay que echarse las manos a la cabeza por tomarla con alcohol, si no nos pasamos de la raya.
Los expertos insisten en la importancia de que el consumo de la cerveza, en personas sanas y fuera de la gestación, se haga de forma moderada: en el caso de las mujeres, una cerveza al día; en los hombres, dos, como norma general.
La ingesta de alcohol en exceso siempre repercute de manera negativa en nuestra salud y calidad de vida.