Debido a estos sucesos, he decidido confeccionar este artículo para hablaros de la bacteria E.Coli y responder a las muchas preguntas que seguro tendréis sobre ella.
En primer lugar, debemos aclarar que es la E.Coli. Se trata de un tipo de bacteria que habita en los intestinos de personas y animales. Es una bacteria común, nada exótica, que posee varias cepas diferentes, casi todas inofensivas. De ellas, la variedad 'E.Coli 0157:H7' es la más peligrosa, ya que genera una toxina que puede provocar enfermedades más serias, como un fallo renal. Precisamente, se especula de momento con que la cepa que está causando las muertes en Alemania es la 0104: H4, muy parecida a la 0157:H7.
Los primeros síntomas que produce esta bacteria suelen aparecer a los 7 días de haber consumido el alimento que las contenía. Las primeras señales se traducen en cólicos abdominales, seguidos por diarrea sanguinolenta, fiebre y vómitos. Estos síntomas pueden tratarse con facilidad. El problema viene cuando la situación se complica, y la infección causa un síndrome hemolítico urémico, que puede degenerar en un fallo renal grave y causar la muerte. Esto es más habitual es la población más vulnerable, es decir, los niños y ancianos.
La E.Coli suele propagarse a través de la carne de vacuno, sobre todo en la carne picada o mal cocinada. Por ello, es una infección más común en Estados Unidos que en Europa, donde se consume abundante carne picada. También puede aparecer en la leche mal pasteurizada. En verduras y hortalizas, como ha ocurrido en este caso, es común encontrarse brotes de E.Coli si éstos han sido regadas con aguas contaminadas o han entrado en contacto con heces de animal (por ejemplo, con fertilizantes naturales).
Como vimos en el otro día en un post del canal de Cocina, para protegernos de la E.Coli en verduras y hortalizas, tan sólo tenemos que lavarlas a conciencia si las vamos a consumir frescas, empleando unas gotas de lejía o algún producto especial, destinado a la limpieza de éstos alimentos. En el caso de la carne, debemos cocinarlas siempre a temperaturas superiores a los 70ºC, limpiar adecuadamente con agua caliente y jabón los utensilios donde se cocine, y por supuesto, no colocar la carne cocinada en el mismo plato en el que estaba cruda.
Para más información, aquí tendréis bastantes datos sobre la E.Coli.
¿Conoces alguna otra medida para protegerse contra la E.Coli?
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