Existen muchas causas para la secreción vaginal excesiva. A continuación hablaremos sobre las más frecuentes:
1. Flujo excesivo cuando estás ovulando
¿Te has preguntado por qué tienes más flujo alrededor de la mitad de tu ciclo menstrual? Durante la ovulación, tu cuerpo pasa por una serie de cambios hormonales que finalmente se traducen en mayores niveles de estrógeno. Bajo la influencia de los estrógenos, el moco cervical se vuelve abundante, transparente y elástico, algo muy notable porque la vagina se siente muy resbaladiza y húmeda. Algunas mujeres reportan grandes cantidades de secreción clara, que incluso, puede llegar a correr por sus piernas.
Después de la ovulación, los niveles de estrógeno disminuyen, mientras aumentan los niveles de progesterona. Esto provoca que el flujo se torne de color blanco lechoso, más espeso y cremoso.
2. Flujo excesivo durante el embarazo
La secreción vaginal clara y abundante durante el embarazo es probablemente la queja más común que las mujeres tienen, además de las náuseas y la micción frecuente. Con los niveles de estrógeno aumentando dramáticamente, el cuello del útero se ablanda y se produce una descarga más acuosa. Esto sucede generalmente con el fin de eliminar las bacterias y mantener a raya a las infecciones, lo que garantiza que tu embarazo progrese de forma saludable y que no haya riesgos para ti o el bebé.
Por tanto, si una mujer ha estado experimentando flujo vaginal excesivo y no está ovulando, esto puede ser un signo de embarazo, más comúnmente si tiene sensibilidad en los senos, micción frecuente, fatiga y otros síntomas comunes del embarazo. En ese caso debe esperar al menos diez días de retraso en el período para hacerse una prueba de embarazo, de lo contrario los resultados pueden no ser relevantes. Los análisis de sangre son mejores, ya que por lo general son más precisos y pueden identificar mejor la presencia de hCG en su cuerpo.
Ten en cuenta que una descarga normal durante el embarazo debe ser clara o blanquecina, delgada o acuosa, y tener sólo un cierto olor a almizcle. Si presentas picazón, hinchazón, enrojecimiento en la vulva y vagina, o si experimentas dolor, incomodidad o ardor al orinar, es posible que tengas una infección, así que asegúrate de llamar al médico y obtener un diagnóstico.
3. El exceso de flujo vaginal durante el sexo
Otra queja vergonzosa para las mujeres es el aumento de flujo blanco o lechoso cuando tienen relaciones sexuales. Esto por lo general es causado por dos factores: en primer lugar está la respuesta de tu cerebro a la estimulación sexual. Cuando estás excitada sexualmente, el cerebro envía estímulos a ciertas glándulas, haciendo que se produzca una secreción blanca y fina para facilitar el coito. Esto es diferente de la descarga vaginal que experimentas sobre una base diaria, ya que proviene de glándulas situadas fuera de la vagina. En segundo lugar, sucede como resultado de un aumento en los niveles de estrógeno. La estimulación sexual provoca dicho aumento y hace que las glándulas produzcan más flujo lubricante. La mayoría de las veces, la vulva queda húmeda y pegajosa durante varias horas después del coito.
4. El flujo excesivo puede ocurrir naturalmente
Como se mencionó anteriormente, muchas mujeres se quejan de grandes cantidades de flujo vaginal. En ocasiones esto no sucede durante la ovulación ni el embarazo, sino como parte normal del sistema de auto-limpieza. Algunas mujeres tienen niveles de estrógeno más altos naturalmente, lo que incrementa la cantidad de flujo que experimentan. Mientras no haya mal olor, picazón u otros síntomas que puedan indicar la presencia de una infección, todo estará bien. Pero sólo para estar segura, es posible que desees ver a tu médico y ser examinada.
5. Flujo vaginal excesivo durante y después del ejercicio
Si tienes un estilo de vida activo y haces ejercicio regularmente, sin duda te habrás dado cuenta de que tu ropa interior puede estar literalmente empapada después de terminar tu rutina. El aumento de la cantidad de descarga después del ejercicio ocurre debido al aumento de la hormona de crecimiento humano y de cortisol, un hecho que a menudo da lugar a desequilibrios hormonales. La consecuencia es el moco cervical abundante, que luce muy aguado, dando una sensación muy similar al sudor. A veces, la cantidad de descarga puede ser tanta que puede atravesar la ropa y causar cierto olor.
¿Hay algo malo con mi flujo vaginal? Siento que me pica
Si has estado experimentando una descarga vaginal abundante que causa picazón, es probable que tengas una infección. Las infecciones más comunes que afectan a la mucosa cervical incluyen la infección por levaduras, la vaginosis bacteriana, la tricomoniasis, la gonorrea, la clamidia y el Virus del Papiloma Humano. Las cuatro últimas suelen ser contraídas a través de las relaciones sexuales, mientras que las dos primeras pueden ocurrir como resultado de los cambios en el estilo de vida, el uso de medicamentos hormonales, de antibióticos, esteroides, la limpieza excesiva o incorrecta de la zona genital y el uso de tampones o protectores diarios fuera del período.
A veces la mejor manera de descubrir lo que está causando una descarga anormal es observar el color. El flujo blanco es muy común cuando se tiene la infección por levaduras, o amarillento en caso de vaginosis bacteriana y gonorrea. La tricomoniasis y clamidia suelen causar una secreción verdosa. Para el diagnóstico correcto debes acudir al médico y obtener un examen vaginal completo.
¿Qué hacer después de tratar una infección?
Una vez que la infección desaparezca, es necesario tener mucho cuidado con algunos aspectos relativos a tu estilo de vida, con el fin de evitarla en el futuro. La mejor manera de mantener la vagina limpia y saludable es comer una dieta equilibrada, evitar los alimentos azucarados, evitar las relaciones sexuales con más de una pareja, usar ropa interior de algodón, limpiar la zona vaginal de adelante hacia atrás y lavarse solo con agua y un jabón poco perfumado.