El riesgo de accidente cerebrovascular (ACV) es mayor en personas que tienen una enfermedad cardíaca o mala circulación en las piernas, causada por estrechamiento de las arterias, de igual manera en personas que tienen malos hábitos como el tabaquismo, consumo excesivo de alcohol, consumo de drogas, una dieta rica en grasa y falta de ejercicio.
Los pacientes con ACV comprenden de varias fases durante su recuperación: tumbado, sentado, de pie, en marcha, etc; para esta fase de la recuperación el paciente se encuentra capacitado para empezar a caminar.