Si bien es cierto que, en la actualidad, cualquier colectivo recurre al asociacionismo para verse beneficiado y sacar más partido de la actividad que promueva (pensemos en sindicatos e incluso en agrupaciones de tipo cultural, culinario, de ocio o relacionado con cualquier afición), más cierto aún es reconocer que las personas mayores y las que tienen algún tipo de discapacidad, así como sus familiares, están más necesitados de apoyo, ayuda y reconocimiento. Pero, desgraciadamente, esto no lo encuentran siempre en la sociedad ni en las instituciones. Entonces tienen que unir fuerzas por sí mismas para hacerse escuchar.
Si todavía no te has asociado, te animamos a que te informes y lo hagas. Encontrarás un incentivo añadido a tu vida, lucharás por tus derechos y ayudarás a otras personas que se encuentran en una situación similar a la tuya.
Los fines del asociacionismo
Los fines del asociacionismo, especialmente en este tipo de colectivo, son varios. Algunos ya los hemos apuntado en el apartado anterior:
Asistenciales. Ayuda y asistencia a los asociados o sus familiares
De concientización. Explicación de los problemas de los asociados, de su situación, necesidades y circunstancias.
Reivindicativa. Reivindicación de los derechos, exigencia a los poderes públicos de la eliminación de barreras y petición de igualdad de posibilidades.
De investigación. Recaudación de fondos para destinarlos a la investigación de enfermedades raras y de otros tipos de trastornos.
Fomento del ocio, turismo, cultura, deporte, etc.
Realización de talleres de terapia ocupacional o preparatoria para distintos trabajos.
Realización de actividades terapéuticas psico-físicas, mentales, etc.
Intercambio de experiencias, opiniones…
El asociacionismo proporciona múltiples beneficios a las personas con discapacidad y a sus familiares
Beneficios del asociacionismo
A nivel grupal, los beneficios están relacionados con la consecución de los fines ya especificados en el apartado anterior.
A nivel particular se consigue:
Una gran satisfacción al poder contrastar experiencias, sentimientos, etc. con otras personas que viven situaciones y dificultades parecidas a las propias.
También se obtienen beneficios al recibir terapias que, en ocasiones, no son subvencionadas por las administraciones.
Son satisfactorios los logros con respeto a derechos y eliminaciones de barreras de cualquier tipo.
El ocio compartido, las excursiones, las vacaciones, el deporte, etc. son deseables para un colectivo muy castigado por sus circunstancias.
La información sobre su propio trastorno o discapacidad.
Etc.
Un poco de historia
No te apures; solo daremos una breve pincelada del nacimiento y evolución del asociacionismo en España.
En España el asociacionismo tiene su origen en la antigua ONCE (Organización Nacional de Ciegos de España). Nación allá por el año 1938.
En 1959 aparece la FEAPS: una asociación no gubernamental de padres de niños subnormales -según la nomenclatura de la época-.
A partir de 1960 empiezan a surgir en nuestra nación una gran cantidad de asociaciones de padres de afectados que cumplían, esencialmente, una función asistencial y ofrecían servicios sociales que paliaban la carencia de ayudas públicas.
Posteriormente, con la creación de las escuelas de educación especial los afectados comienzan a estar correctamente diagnosticados (antes prácticamente todos los discapacitados eran subnormales). Este hecho ayuda a la creación y desarrollo de diversas asociaciones apoyadas y alentadas por el profesorado en muchas de las ocasiones.
Posteriormente, con la progresiva sensibilización de la sociedad, las asociaciones han ido cambiando y adaptándose a las necesidades de las personas con discapacidad.
¿Quiénes son los asociados? Perfil de los asociados
Los asociados, según los casos pueden ser:
Los propios afectados, o
sus familiares.
En el caso de enfermedades raras, por ejemplo, casi siempre son los padres o familiares los que forman asociaciones o, incluso, crean fundaciones por la enorme soledad a la que se enfrentan.
La información. Algunos enlaces a distintas asociaciones
Tener información es lo primordial. Si te encuentras algo perdido no dudes en contactar con alguna agrupación. Sea cual sea tu caso o discapacidad, siempre habrá alguien dispuesto a informarte. Luchar por conseguir mejoras en las infraestructuras municipales y urbanas, por ejemplo, resulta ser un estímulo, un acicate en la vida que te favorece a ti personalmente y a otras personas con alguna problemática similar. Es muy sencillo: se trata de ayudarte y ayudar a los demás. La vida, entonces, cobra otro sentido.
Como ya indicamos en el apartado dedicado a la historia, hoy en día existen multitud de asociaciones y agrupaciones pequeñas que operan a nivel local en la mayoría de los casos. Pero a mayor escala están las entidades estatales, las confederaciones autonómicas y las federaciones provinciales. A continuación te proporcionamos el enlace a la web de USUAL donde aparecen las direcciones de las distintas asociaciones españolas clasificadas según sea la discapacidad:
Discapacidad física
Discapacidad mental
Discapacidad visual
Discapacidad auditiva
Trastornos del desarrollo y de la comunicación
Otras
El enlace es:
http://campus.usal.es/~inico/texto/enlaces/asociaciones/espanolas.htm
Un cordial saludo,
María Luisa Sánchez Vinader
Licenciada en Filosofía y Ciencias de la Educación
Diplomada en Magisterio de Educación Especial y Pedagogía Terapéutica
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