Cuando yo sufría de colon irritable no me interesaban las causas, sólo deseaba encontrar una fórmula mágica que me permitiera eliminar por completo mi problema. Y de forma rápida. Pero con el paso del tiempo me di cuenta de que conociendo cuáles son las causas por las que llegamos a poseer un colon irritable, el camino para llegar a la solución se hace mucho más corto y efectivo.
Si todavía tienes un colon irritable y sufres por ello, es bueno que sigas leyendo con total atención?
¿Cuáles son las causas para tener un colon irritable?
El síndrome del intestino irritable (SII) se refiere a un trastorno que implica dolor y calambres abdominales, así como los cambios en los movimientos del intestino. Debes tener en cuenta que no es lo mismo el síndrome de intestino irritable que una inflamación intestinal, como lo son la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa.
Causas
Hay varias causas posibles de este síndrome. Por ejemplo, puede haber un problema en los músculos intestinales, o el intestino puede ser más sensible al estiramiento o movimiento. No hay ningún problema relacionado con la estructura del intestino. Todavía no se descubrió por qué las personas desarrollan este síndrome, pero en algunos casos, se produce después de una infección intestinal. También puede haber otros desencadenantes.
El estrés puede agravar el SII. El colon está conectado al cerebro a través de los nervios del sistema nervioso autónomo. Dichos nervios, se tornan más activos durante las ocasiones de estrés y pueden hacer que el intestino se apriete o contraiga aún más. Las personas con SII podrían tener un colon que es demasiado sensible a estos nervios.
Este síndrome puede generarse a cualquier edad, pero por lo general aparece en la adolescencia y la edad adulta temprana. Es más común en las mujeres. En los EE.UU., una de cada seis personas tiene síntomas de SII. Esta es la queja intestinal más común para que los pacientes consulten a un gastroenterólogo.
Exámenes
En la mayoría de los casos, el médico puede diagnosticar el SII en base a los síntomas o pruebas que presente el paciente. Seguir una dieta libre de lactosa durante 2 semanas puede ayudar a que tu médico evalúe si el problema se encuentra en una posible deficiencia de lactosa.
No existe una prueba específica para diagnosticar si el SII existe, pero es posible hacer pruebas para descartar otros problemas:
- Exámenes de sangre para ver si existe un recuento sanguíneo bajo (anemia)
- Algunos pacientes necesitarán hacer una sigmoidoscopia o una colonoscopia. Durante estas pruebas, un tubo hueco se inserta a través del ano. El médico puede ver el tubo.
Vas a necesitar de estos exámenes si estás en estos casos:
- Los síntomas comienzan en la madurez (después de 50 años)
- Tienes síntomas como pérdida de peso o sangre en las heces
- Tus análisis de sangre son anormales (tales como recuentos sanguíneos bajos)
Entre los trastornos que causan síntomas similares se incluyen:
- Enfermedad Celíaca
- Cáncer de colon (aunque el cáncer rara vez causa síntomas típicos de SII, a menos que los síntomas tales como pérdida de peso, sangre en las heces o los análisis de sangre hayan cambiado)
- Enfermedad de Crohn o colitis ulcerosa
Entre los síntomas que trae el síndrome de intestino irritable podemos destacar:
Los síntomas pueden ir variando de leves a graves. En la mayoría de los casos, los síntomas suelen ser leves. Los síntomas varían de persona a persona: dolor abdominal, gases e hinchazón durante por lo menos seis meses son los principales síntomas del SII.
El dolor y otros síntomas suelen con frecuencia:
- Ocurrir después de las comidas
- Aparecer y desaparecer
- Se reducen o desaparecen después de una evacuación del estómago
Las personas con diarrea tienen movimientos intestinales frecuentes, no controlados y líquidos. Ellos sienten una necesidad constante y urgente de evacuar que es muy difícil de controlar.
Las personas con estreñimiento tienen dificultad en pasar las heces y deposiciones menos frecuentes. A menudo tienen que evacuar y sentir calambres con los movimientos intestinales. En general, no eliminan las heces o excretan una pequeña cantidad de heces.
En algunas personas, los síntomas pueden empeorar durante unas semanas o un mes, y luego ocurrir una disminución durante un tiempo. En otros, los síntomas se manifiestan la mayor parte del tiempo y pueden aumentar incluso lentamente.
Las personas con SII también pueden perder el apetito.
Ayuda médica
Llama a tu médico si presentas síntomas del síndrome del intestino irritable o si notas un cambio persistente en los hábitos intestinales.
Tratamiento para acabar con el Síndrome del Intestino Irritable
El objetivo del tratamiento es aliviar o, en el mejor de los casos, eliminar los síntomas.
Los cambios en la dieta pueden ser útiles en algunos casos de SII. Por ejemplo, los hábitos de ejercicio regular y la mejora del sueño pueden reducir la ansiedad y ayudar a aliviar los síntomas intestinales.
Sin embargo, no hay una dieta específica que pueda ser recomendada para el SII, ya que la condición difiere de una persona a otra. Los siguientes cambios pueden ser útiles:
- Evita los alimentos o bebidas que estimulen los intestinos (como la cafeína, el té o las bebidas a base de cola)
- Evita comidas abundantes
- Evita el trigo, el centeno, la cebada, el chocolate, los productos lácteos y el alcohol
- Aumenta el consumo de fibra dietética
Consulta a tu médico antes de tomar medicamentos de venta libre. El sabrá qué es lo mejor para ti.
Ten cuidado con:
- Los suministros de fibra pueden agravar los síntomas
- Los laxantes que se consumen para combatir el estreñimiento pueden viciar tu intestino
Expectativas
El síndrome del intestino irritable puede ser una enfermedad de por vida. Para algunas personas, los síntomas son incapacitantes, a tal nivel de hacer que una persona deje de lado su trabajo, sus encuentros sociales y hasta a su pareja.
Cabe destacar y aclarar que el Síndrome del intestino irritable no causa daño permanente a los intestinos y no conduce a una enfermedad grave como el cáncer.