La asertividad es la capacidad que nos ayuda a expresar nuestros derechos, ideas, necesidades, opiniones y sentimientos de manera directa, clara y honrada. Hace que nos respetemos tanto a nosotros como a los demás, así como no dejarnos manipular y tampoco manipular a los demás.
Hace referencia las habilidades sociales que poseemos, a la forma de responder ante los conflictos y a la manera de relacionarnos con los demás. Cabe destacar también que la asertividad está muy ligada al desarrollo de una buena autoestima, pues cuando estamos seguros de nuestra valía y de nosotros mismos, ejerceremos nuestros derechos y lo llevamos a la práctica en la vida diaria.
Existen tres estilos de conductas (sumisa, agresiva y asertiva). Cada una de ellas hace referencia a la forma en la que nos comportamos, sentimos y pensamos ante los diferentes momentos a los que hacemos frente.
Los seres humanos no somos totalmente agresivos, sumisos o asertivos, sino que tenemos ciertas predisposiciones o inclinaciones que pueden variar a lo largo de nuestra vida.
Veamos las características de estos tres patrones de conducta.
Características de los patrones de conducta
Estilo pasivo
Está relacionado con la sumisión. Es decir, no defienden sus derechos e intereses personales. Suelen ser personas muy empáticas con los demás, con miedo a la disputa o al juicio por parte del resto de personas. Lo que se traduce en evitación y conductas de sobreadaptación.
Es resumen, anteponen los intereses de los demás por encima de los suyos.
Tienen dificultades para participar en las conversaciones y decir lo que opinan, pueden bloquearse en situaciones de conflicto y les es difícil marcas límites, decir que “no” o expresar su molestia.
A nivel corporal, podemos observar que utilizan un volumen de voz bajo, se presenta una dificultad para expresarse, se puede permanecer en silencio por no saber qué hacer o decir, así como evitar el contacto ocular y estar tenso a nivel postural.
Todo esto repercute y tiene consecuencias como la pérdida de autoestima, sentimientos de incomprensión, manipulación o impotencia. Fruto de la acumulación de tensiones, estas personas pueden tener manifestaciones de agresividad incontrolables.
Estilo agresivo
Defiende en exceso sus derechos e intereses sin tener en cuenta lo de los demás. Tienen dificultades par a hacer frente o afrontar determinadas situaciones o conflictos, puesto que pueden percibir como un ataque lo que otras personas les digan.A nivel de lenguaje, puede hacer uso de expresiones tajantes como: “tienes que…”, “debes de”, “no te voy a permitir que..”, interrumpiendo el discurso de la otra persona y mandando.
A nivel corporal, podemos observar un tono de voz elevado, pudiendo interrumpir, atacar con desprecios o ironías, o en casos extremos, amenazar o insultar. Suelen estar tensos y tener un contacto ocular retador.
Todo esto repercute y tiene consecuencias como una bajada de autoestima, sensación de soledad, ansiedad y hostilidad creciente.
Personas asertivas
Conocen sus derechos y los defienden, respetando los de los demás. Son capaces de expresar sus sentimientos, ideas y opiniones, de forma honesta y clara. Saben decir que no, poner límites, pedir aclaraciones, realizar peticiones y resolver conflictos de forma en la que se respeten todas las partes.Sienten que tienen el control, se sienten respetados y valorados y esto se traduce en una buena autoestima.
A nivel corporal, podemos observar que son sujetos que miran a los ojos de frente mientras hablan y tienen posturas de cercanas, de firmeza y seguridad, así como un volumen, ritmo y expresividad adecuadas al mensaje que quieren transmitir.
Para ser asertivos, primero tenemos que conocer nuestros derechos
Tienes derecho a:Ser tratado con respeto y dignidad
No responsabilizarte de los problemas de los demás
Tener y expresar tus sentimientos y opiniones
Rechazar peticiones y decir “no” sin sentirte culpable
Ser escuchado y tomado enserio
Estar solo aún cuando los demás deseen tu compañía
Cambiar
Cometer errores
Decidir sin presiones
Elegir que hacer con tu tiempo, cuerpo y propiedad
Intentar cambiar lo que no te satisface
No justificarte
Fracasar
Ser tú mismo y no ser perfecto
Pedir ayuda
Establecer tus prioridades y tomar tus propias decisiones
Hacer cualquier cosa sin violar los derechos de los demás
¿Cómo podemos ser más asertivos?
Existen diferentes tipos de técnicas para entrenar nuestra asertividad.Aquí os mencionamos algunas de ellas:
Técnicas de reestructuración cognitiva
Entrenamiento en habilidades sociales
Técnicas de reducción de la ansiedad
Técnicas en resolución de problemas
Mediante estas técnicas, puestas en práctica a través de la terapia psicológica, puedes mejorar tu capacidad de comunicación. Además, te ayudará a fomentar tu autoestima.
Si te has identificado con algunos de estos estilos de conducta y deseas aprender a ser mas asertivo, llevándolo a la práctica, en Psicólogos Málaga Psicoabreu contamos con especialistas que te enseñarán, entrenarán y darán herramientas que desarrolles una sana asertividad y mejores tu autoestima.
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