Hoy me gustaría hablaros de la alimentación procesada y aditivos, ¿porqué son tan perjudiciales para nuestra salud?
¿cuántas bandejas de pavo, u otros embutidos, latas, carnes, frutos secos, patatas fritas y un sin fin de productos que consumimos a diario y ofrecemos a nuestras familias pensando qué damos productos saludables y en realidad no lo son?
Entre los muchos aditivos químicos en nuestros alimentos se encuentra el glutamato monosódico(GMS), también conocido como el aditivo umami En términos químicos el GMS contiene un 78% de ácido glutámico libre, 21% de sodio y hasta 1% de contaminantes.
¿Pero que és y como nos afecta a nuestra salud y de los nuestros?
El consumo de GMS puede causar dolores de cabeza, migrañas, espasmos musculares, nausea, alergias, anafilaxis, ataques epilépticos, depresión e irregularidades cardiacas. Ya que es una neurotoxina, daña el sistema nervioso y sobre-estimula a las neuronas llevándolas a un estado de agotamiento, y algunas de ellas eventualmente morirán como consecuencia de esta estimulación artificial.
el consumo de este aditivo se asocia a efectos secundarios tales como mareo, nausea, sudación, debilitamiento, taquicardia y dolor de pecho, entre otros. Y si bien se sigue utilizando masivamente en miles de alimentos procesados.
Entonces ¿Qué hacer al respecto y como evitarlo?
Para evitar consumir GMS es fundamental consumir productos orgánicos BIO y dejar de consumir alimentos procesados. Antes de comprar cualquier producto procesado (salsas, galletas, alimentos congelados y comida rápida) lee las etiquetas, si tiene glutamato monosódico no lo compres. En ocasiones etiquetan al GMS de otra manera o es uno de los compuestos de: la proteína texturizada, el alimento para levadura, el concentrado de proteína de soja, la gelatina o el nutriente de levadura.
Los alimentos bajos en calorías o los que están enriquecidos con vitaminas, el almidón y jarabe de maíz, el jarabe de arroz y la leche en polvo, también contienen rastros de GMS.
Pero la mejor manera de radicalizar es con una alimentación Bio y evitar al máximo procesados, es cierto que pagarás algo más pero inviertes en salud y en los tuyos, ¡VALE LA PENA!