Seguramente todos en algún momento de nuestra vida hemos cepillado nuestros dientes, os preguntaréis ¿en algún momento de nuestra vida?. El motivo de esta frase es porque todavía hay bastante gente que no se cepilla los dientes a diario, ni todas las veces que debería.
Por otro lado tenemos a las personas que cepillan sus dientes todos los días varias veces. ¡Perfecto! Pero… ¿lo estás haciendo bien?
De poco sirve cepillarnos los dientes muchas veces y muy fuerte si no dedicamos el tiempo necesario a ello, o dejamos olvidadas algunas zonas que son importantes.
Cepillado con cepillo de dientes manual.
Antes de nada debemos de elegir el cepillo y la pasta de dientes correcta para cada caso. La cantidad de pasta dental que debes poner en el cepillo es igual al tamaño de un guisante. Con esto ya podemos comenzar a dejar nuestros dientes brillantes.• Tenemos que seguir siempre el mismo orden para no dejar ningún diente ni ninguna de sus partes sin cepillar.
• Coloca tu cepillo de dientes formando un ángulo de 45º con la encía.
• Mueve tu cepillo haciendo pequeños círculos, siempre desde la encía hacia el final del diente, para no dañarla. Si cepillamos de delante hacia atrás o de abajo hacia arriba podemos originar recesiones en la encía (la encía se pierde dejando expuesta la raíz del diente) en algunos casos provocando sensibilidad.
• Cepillar los dientes con demasiada fuerza también puede dañar tus encías. Pasa el cepillo varias veces sobre el diente de forma suave, el diente se limpiará correctamente y tus encías lo agradecerán.
• Es importante cepillar la encía para favorecer la circulación sanguínea de la misma.
• Comenzaremos cepillando la parte superior derecha y poco a poco avanzaremos hacia la zona anterior (de molares a paletas, nosotros las llamamos centrales), seguiremos avanzando desde los centrales hacia el último molar del otro lado. Repetiremos la misma operación en los dientes de abajo.
• Una vez cepilladas las caras externas de los dientes pasaremos a las internas. En esta zona cepillaremos los dientes igual que arriba, desde la encía hacia el diente, pero en las zonas anteriores, de canino a canino (colmillo), el cepillo lo colocaremos en posición vertical para que nos sea mas fácil llegar hasta la encía.
• Continuaremos por las caras masticatorias de los dientes. Es la parte que tritura los alimentos. Esta parte del diente tiene muchos surcos que hay que limpiar bien para que no se formen caries.
• Hemos terminado con el cepillo, y pasamos a usar hilo dental. El hilo dental es muy importante en la higiene de tu boca, al principio cuesta acostumbrarse, pero después no puedes pasar sin él. Lo usaremos al menos una vez al día, y sobre todo por la noche. Si tus espacios entre los dientes son muy grandes te recomiendo usar cepillos interdentales en vez de hilo dental.
• Por último y muy importante, limpia tu lengua, puedes hacerlo con el cepillo y pasta, o con el cepillo sin pasta si te resulta desagradable con jabón y también existen limpiadores linguales. La lengua no es lisa, es el sitio perfecto para las bacterias, que además provocan mal olor. No te olvides de ella.
• De forma opcional, podéis utilizar un enjuague bucal, mi consejo es que no tenga alcohol ni tampoco clorhexidina. La clorhexidina mancha los dientes y solo se recomienda en tratamientos específicos, si la necesitas tu dentista te la prescribirá.
Cepillado con cepillo de dientes eléctrico.
El cepillo eléctrico hace el movimiento de rotación el sólo, por lo tanto no tendremos que estar moviendo todo el rato la mano.• Al igual que con el cepillo manual, seguiremos un orden y colocaremos el cepillo con un ángulo de 45º sobre el diente, y en las zonas anteriores el cepillo en posición vertical.
• Cepillaremos el diente uno a uno presionando un poco el cepillo sobre el diente, y él con su rotación lo limpiará. Tenemos que tener cuidado de no presionar demasiado para no dañar la encía, algunos cepillos eléctricos tienen un sensor con una luz, cuando se presiona demasiado esa luz se enciende, puede ser de gran ayuda si te cepillas demasiado fuerte.
• Si el cabezal del cepillo es mas pequeño que el diente, moveremos éste hasta abarcar toda la superficie dental y un poco la encía.
• Al igual que con el cepillo manual después debemos limpiar entre los dientes y la lengua. Un truquillo para llegar bien a los molares es cepillarlos con la boca un pelín cerrada sin que lleguen a juntarse los dientes, de éste modo el carrillo no estará en tensión y el cepillo llegará mas fácilmente a la zona posterior.
No olvides cepillarte al menos 3 veces al día. Y sobre todo y muy importante por la noche.