La implantología hace tiempo que llegó para quedarse, en nuestro país los implantes dentales existen desde los años 80 aunque durante la primera década fue una técnica limitada a muy pocos especialistas.
En España se colocan unos 800.000 implantes al año, lo que sitúa a nuestro país en los primeros puestos del ranking mundial, superado únicamente por Corea.
De todas las áreas de la Odontología la que mas ha crecido es la implantología, estas cifras tan altas de implantes colocados llevan de la mano un dato que empieza a preocupar a los profesionales, el aumento de fracaso de los implantes. Desde que la implantología se convirtió en un tratamiento odontológico ha habido complicaciones tal y como ocurre en cualquier ámbito de la medicina. Aún así el porcentaje de fracasos suele ser muy bajo, ronda entre un 5% y un 10%.
TIPOS DE COMPLICACIONES
Las complicaciones que pueden aparecer alrededor del uso de un implante pueden ser muy variadas, ya que es posible que aparezcan en el ámbito biológico, técnico estético. Las complicaciones biológicas son las que tienen que ver con el estado de los tejidos que rodean al implante, siendo la pérdida de la integración del implante la principal de ellas.
Por otro lado las complicaciones técnicas están relacionadas con la con la rehabilitación protésica que incluye el aflojamiento de tornillos, la fractura de la porcelana, la fractura de los componentes protésicos y el posible mal ajuste de las estruccturas.
Y por último los problemas estéticos, están relacionados con una incorrecta planificación del caso que impiden conseguir el resultado final esperado.
INFECCIONES TEMPRANAS
Son una de las complicaciones mas frecuentes, aunque únicamente afectan a entre un 1% y un 2% de los implantes, pero llega hasta el 6% de los pacientes, porque muchas personas reciben múltiples implantes y tienen por tanto mayor riesgo de infección, la mayoría de las infecciones suelen diagnosticarse en el primer mes.
ENFERMEDADES PERIIMPLANTARIAS
Pérdida de hueso alrededor del implante
La periimplantitis se define como un proceso imflamatorio que afecta a los tejidos que rodean al implante dental y que ocasiona una pérdida del soporte óseo en el que se ha integrado. Si el problema inflamatorio afecta únicamente a los tejidos blandos, se denomina mucositis periimplantaria ( sin perdida de hueso), pero si no se trata a tiempo puede originar una periimplantitis (inflamación con pérdida de hueso). Según un estudio transversal de la Universidad de Barcelona publicado en el año 2012, la periimplantitis podría afectar hasta un 20% de los pacientes portadores de implantes, y la mucositis hasta un 45%.
Un factor ultra importante que provoca enfermedades periimplantarias es el tabaco que aumenta por tres la probabilidad de perder un implante.
Después de ésto reconoceréis la importancia que tienen las revisiones semestrales o anuales para evitar la pérdida de un implante. Está demostrado que con revisiones e higienes (limpiezas) periódicas se reduce el riesgo de fracaso de implantes por pérdida de hueso.
COMPLICACIONES MECÁNICAS
Éstas son las fracturas o aflojamientos de tornillos, prótesis o implantes. para prevenirlas es fundamental seguir un protocolo de diagnóstico y tratamiento y contar con un buen laboratorio de prótesis.
El factor de riesgo principal para las complicaciones mecánicas es el bruxismo (rechinar de los dientes) especialmente si los dientes opuestos son propios o prótesis fija.
LESIONES NERVIOSAS
Es una complicación infrecuente pero muy angustiosa para los pacientes y con mucha repercusión legal son las lesiones nerviosas y el dolor neuropático tras la colocación del implante, suelen ocurrir en 1,3% de los implantes colocados y sobre todo en pacientes mujeres mayores de 60 años.
COMPLICACIONES TEMPRANAS
Mas conocidas como las complicaciones postoperatorias, suelen producirse por insuficiencia de la cantidad y calidad del hueso a la hora de colocar el implante. Ésto ocasiona problemas a la hora de integrarse el implante.
Y os estaréis preguntando, ¿si no hay buena calidad del hueso por que me lo colocan?, en muchas ocasiones en una ortopantomografía (radiografía de la boca) o tac puede parecer haber buena calidad de hueso y luego cuando abrimos para colocar encontrarnos que el hueso no es tan bueno como se apreciaba en las pruebas diagnósticas.
COMPLICACIONES TARDÍAS
Son las que ocurren tras la carga del implante, una vez colocada la corona. Suelen producirse como resultado de una inflamación de los tejidos periimplantarios por mala higiene por parte del paciente.
PROCEDIMIENTO A SEGUIR TRAS UN FRACASO
Realmente el fracaso de un implante no representa ninguna consecuencia importante para la salud del paciente desde un punto de vista medico. El fracaso del implante puede provocar un disgusto en el paciente, pero nada mas. De hecho la mayoría de los implantes fracasados son solucionados posteriormente con la colocación de un nuevo implante.
Si existe un problema mecánico, a menos que sea una fractura del implante, que por otra parte son extremadamente raras, se suele solucionar cambiando el componente protésico ( tornillo) o reparando la prótesis.
Existen investigaciones continuadas para crear un implante que pueda evitar algunas de estas complicaciones y que los tiempos de integración sean mas cortos.
En conclusión, un implante dental es una de las mejores soluciones para sustituir una pieza dental pero nunca va a ser mejor que un diente propio, intentemos conservar nuestros dientes el máximo de años con nosotros.