Para descubrirlo te invito a leer la entrada de hoy...
Deben cepillarse en su totalidad las piezas dentales, por su cara externa o vestibular, con un movimiento vertical (de barrido), tanto en dientes superiores como inferiores.
En el caso de los dientes inferiores, el movimiento debe comenzar en el límite de la encía y dirigirse de abajo arriba (siempre haciendo un giro de muñeca para efectuar la acción de barrido) y no en sentido horizontal, ya que estaríamos desplazando la placa bacteriana hacia ambos lados dejandola acumulada entre los dientes (espacios interproximales).Repetir la operación a la inversa para el caso de los dientes superiores, es decir,desde la encía hacia abajo.Para hacerlo de una forma comoda debe existir al menos un centímetro de separación entre ambos maxilares.El cepillado cuidadoso de la cara interna de los dientes es de gran importancia, ya que, que no es tan fácil llevarlo a cabo y generalmente se descuida. Se realiza de la misma forma que en las caras externas del diente.
Para efectuar la limpieza de la cara masticatoria (también llamada oclusal) de premolares y molares hay que apoyar el cepillo y efectuar movimientos circulares tanto en el maxilar superior como en el inferior.
Conviene complementar la limpieza de los dientes con un masaje de las encías que active la circulación sanguínea con un cepillo seco, sin pasta dentífrica apoyando el cepillo con una ligera inclinación sobre la encía, y efectuando una serie de leves movimientos de adelante hacia atrás(vibratorios), sin llegar a desplazar el cepillo. Y para finalizar no hay que olvidarse de la lengua, pues en ella también se depositan restos de alimentos y microorganismos causantes del mal aliento.
Para que la tarea resulte aun más completa, es aconsejable pasar hilo dental en cada uno de los espacios interproximales ( en el caso de tener grandes separaciones usar cepillos interproximales de venta en farmacias).
Y realizarnos el último enjuague con un colurorio (una recomendacion personal es dividir 50% agua y 50% colutorio, ya que algunos contienen alcohol y son demasiado fuertes para la mucosa oral).
Estos dos últimos pasos se pueden realizar por la noche antes de acostarse; durante el día basta con cepillarse correctamente.
Cabe destacar que lo más importante de la higiene bucal es la acción mecánica del cepillo dental que se consigue con una buena destreza manual del paciente.