Fuente de la imagen: Stock Adobe La quinoa es una semilla que poco a poco se ha ido incorporando en nuestra dieta. Muchos hablan de ella como un superalimento dadas todas sus propiedades beneficiosas para la salud. Además, es muy versátil a la hora de cocinar. Aunque nos parezca que lleva poco tiempo con nosotros, la realidad es que ha sido y es un alimento muy importante en algunas regiones del mundo (sobre todo en la América Latina) y, tal es su poder nutritivo y su trascendencia que el 2013 fue el Año Internacional de la quinoa según la FAO.
Si bien está clasificada como semilla, la quinoa es conocida como pseudocereal, puesto que se puede consumir como un cereal o como un grano. Suele ser la reina de muchos platos pero también puede molerse para hacer harina. Sea como fuere, su consumo aporta muchísimos beneficios a nuestra salud.
Para empezar, tiene más proteínas y grasas insaturadas que cualquier cereal, destacando por encima de todo su contenido en omega 3 y omega 6, y tiene mucha menos cantidad de hidratados. Además, es muy rica en fibra dietética: entre los 13,6 g y los 16 g por cada 100 g de peso en seco, otra vez un valor muy superior a otros cereales. También es una importante fuente de minerales (destaca su contenido en hierro, magnesio y zinc) y de vitamina B2, vitamina E y ácido fólico.
Con todas estas propiedades y componentes, su consumo es muy beneficioso para mantener sano nuestro organismo.
Entre sus beneficios destacan los siguientes:
Gracias a su alto contenido en fibra, su bajo índice glucémico y su elevado aporte calórico, la quinoa es un alimento muy recomendado para bajar de peso de una forma saludable y también para personas diabéticas.
Es apta para personas celíacas, puesto que no contiene gluten.
Ayuda a controlar los niveles de colesterol en sangre.
Ayuda a evitar el estreñimiento y la distensión abdominal.
Mantiene la piel hidratada y ayuda a fortalecer el cabello.
Es un poderosísimo antioxidante. Recetas saludables con quinoa
Es muy fácil añadir la quinoa a la dieta, dada su versatilidad a la hora de cocinar. Uno de los usos que suele darse a la quinoa, como ya os dijimos, es molerla para conseguir harina con la que realizar pan. Sin embargo, también se puede consumir en ensaladas o como un arroz. Prueba de ello son estas exquisitas recetas de quinoa con puerro y calabacín y quinoa con pollo y verduras.
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