No se sabe mucho acerca de esta condición. El prefijo griego “dis” se utiliza generalmente en la medicina en el sentido de “dolor”, y la disorgasmia masculina se presenta en algunos hombres que han tenido una cirugía de próstata.
Hasta hace muy poco, no había podido encontrar ninguna mención de esta condición en ningún libro de texto médico o ginecológico estándar. Tampoco había ningún estudio del mismo en las revistas médicas. Sin embargo, algunos estudios recientes en los EE.UU. sugieren que el dolor en el orgasmo puede ser “causado por la píldora".
Los orgasmos dolorosos y la menopausia
Por lo general, el problema comienza de la nada (cuando una mujer experimenta un orgasmo, ya sea con un compañero o por su cuenta). Entonces, de repente, comienza a sentir un "calambre" en la parte más baja del abdomen. La mayoría de los pacientes lo describen como “bastante malo” o “muy grave”. En algunos casos, se irradia hacia arriba en la parte posterior inferior. En otros, afecta a la zona alrededor del recto.
Los pacientes afirman que el dolor de la disorgasmia es alarmante en el momento, y dura desde unos pocos minutos a unas pocas horas. Por lo general, se repite en los orgasmos subsecuentes en las próximas semanas, pero se vuelve menos grave en un período de meses y, como regla, finalmente desaparece por completo.
Otras causas
Muchas de estas mujeres, que han publicado sus historias en Internet, dicen que tienen otras condiciones ginecológicas (como quistes ováricos, fibromas o endometriosis). Pero estos trastornos son muy comunes en el grupo de 40 a 55 años de edad, por lo que puede haber un vínculo causal con el dolor. Sin embargo, si tienes este síntoma, sin duda vale la pena tener una revisión ginecológica para la endometriosis, incluyendo una exploración.
En casi todos los casos, estos relatos dicen que el médico o ginecólogo de la mujer no pudo encontrar la causa del problema.
Nuevos hallazgos
El profesor Jennifer Hillman, de la Universidad de Penn State, ha publicado un libro, alegando que La disorgasmia puede ser causada por una variedad de medicamentos, como los antidepresivos (incluyendo Prozac), otras drogas psicoactivas y el remedio natural muy conocido, la hierba de San Juan.
Aunque todavía no he encontrado la confirmación de sus puntos de vista, es obvio que si experimentas dolor orgásmico mientras usas cualquiera de estos medicamentos, sería aconsejable pedirle a tu médico que cambie a otro tratamiento y ver qué pasa. También ha habido mucha publicidad acerca de la afirmación de que las dosis bajas de píldoras anticonceptivas pueden causar orgasmos dolorosos.
Tratamiento inmediato
En la mayoría de los casos que he visto, las mujeres se sentían mejor si tomaban inmediatamente un analgésico o medicamento antiinflamatorio no esteroides s (AINE) como el diclofenaco y el ibuprofeno, o incluso la aspirina.
El calor, en forma de una botella de agua caliente aplicada a la parte inferior de la panza, también era útil. Una mujer, cuyo dolor era principalmente en el área rectal, me dijo que ella consiguió el alivio de los síntomas mediante la inserción de un supositorio de diclofenaco 50 mg en el recto.
Tratamiento a largo plazo
Si experimentas dolor en el orgasmo, yo recomendaría que en los próximos meses, te tomaras un analgésico antes de tener sexo. Trata de tomarlo alrededor de dos a tres horas antes del acto sexual, si es posible. Por favor ten en cuenta que estos medicamentos pueden tener efectos secundarios.
Debido a mi teoría de que el problema está vinculado a una caída en los niveles de hormonas femeninas en torno a la época de la menopausia, he puesto a la mayoría de los pacientes a tratarse con la terapia de reemplazo hormonal (TRH) durante unos meses. Esto parece haber ayudado a un buen número de mujeres. Pero, por desgracia, he sido incapaz de llevar a cabo un ensayo clínico adecuado, o hacer cualquier seguimiento sistemático. Además, ahora sabemos que la TRH no está exenta de riesgos, aunque estos son pequeños cuando el tratamiento se realiza por un corto tiempo.
Perspectivas
Si tienes orgasmos dolorosos, el pronóstico no es grave. Probablemente estarás bien a largo plazo y serás capaz de disfrutar del sexo sin dolor una vez más. Sin embargo, si el dolor ocurre más de una vez te recomiendo consultar a tu médico y tener un chequeo. Un examen realizado por un ginecólogo es también una buena idea. Por último, discute el problema con tu pareja. Si él (o ella) no sabe lo que estás experimentando, esto puede dar lugar a malentendidos y sentimientos de rechazo.
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