Son verdaderos elixires de salud: puros y concentrados, aportan nutrientes esenciales y regeneran el organismo.
TÓNICO PARA LAS CÉLULAS; Bayas de Goji se han utilizado tradicionalmente en Oriente para promover la longevidad y como tónico de riñones, hígado y músculos. Hoy se conoce su riqueza en antioxidantes y su efecto prebiótico, por su contenido en polisacáridos, y hay quien no duda en considerarlo un superalimento.
Sus antioxidantes, entre los que encontramos diferentes carotenos, protegen frente a la pérdida de visión que suele acarrear la edad. También aportan esteroles, que ejercen una acción antiinflamatoria y reducen el colesterol LDL y total.
Se pueden tomar como tentempié o añadirlas al muesli o las ensaladas.
RICO EN OMEGA-3; El aceite de Nueces sorprende por la intensidad de su aroma y su sabor dulce y delicado. Sus beneficios para la salud cardiovascular y cerebral lo hacen muy apreciado. Además de ácido oleico, como el aceite de oliva, aporta abundantes ácidos grasos omega-3 1,4g en una cuchara, el 100% de las necesidadedes diarias.
El virgen, obtenido por presión en frío de las nueces, es además rico en vitamina E y fitoesteroles. Los omega-3 combinados con la vitamina E y los fitoesteroles , todo ellos de propiedades antioxidantes, mejoran el estado de los vasos sanguíneos y contribuyen a regular el colesterol.
LAS PROTEÍNAS MÁS COMPLETAS; La Quinoa, un antiguo alimento de los incas, es hoy un <<básico>> de la alimentación vegetariana. Esto se debe sobre todo a sus proteínas (13%), que al poseer todos los aminoácidos esenciales en una proporción óptima se consideran de gran calidad. También en que suele proceder de cultivos tradicionales de Perú que prescinden de plaguicidas. Aporta sobre todo energía en forma de hidratos de carbono (68%), que se asimilan gradualmente gracias a la fibra (5,9%), y es rica en fósforo, magnesio, hierro y magnesio. La más común es la Quinoa blanca, aunque también puede ser roja o negra, con matices de sabor diferente.
MINERALES DEL MAR; Alga Arame, marrón y delicada, posee un suave sabor dulce que la convierte en una sabia elección para iniciarse en el consumo de algas. Como otras algas pardas aporta abundante yodo, así como una gran variedad de otros minerales y oligoelementos. También es rica en vitaminas A y del grupo B.
Por su Equilibrio mineral es apta para personas hipertensas y se recomienda tradicionalmente para mejorar la circulación sanguínea. Se considera detoxificante y fuente de fibra prebiótica. Su dulzor se debe a su malitol, un azúcar natural presente en otras algas pardas. Es fácil de preparar. Basta con dejarla en remojo durante unos diez minutos o cocinarla brevemente . Añádela a ensaladas, guisos, salteados y cereales.
Notas: