En la secreción de moco cervical se distinguen estas 6 etapas:
1. Los días secos
2. La secreción pegajosa y gruesa
3. El moco cremoso
4. La secreción acuosa y profusa
5. El moco cervical de la ovulación, parecido a una clara de huevo
6. Descarga gruesa y blanca
Representada en forma de diagrama, esta lista permite rastrear la influencia del estrógeno sobre el ciclo menstrual. En fases 1-2 el nivel de estrógenos es extremadamente bajo, en las etapas 3-4 comienza a elevarse y las posibilidades de impregnación también aumentan. La etapa 5, donde hay un pico en la prevalencia del estrógeno, provoca la aparición de óvulo. Y, por último, en la sexta fase, la curva desciende, ya que el estrógeno concede su lugar a otra hormona igualmente vital, la progesterona. En consecuencia, la estructura pegajosa típica del moco cervical fluido y casi transparente durante la ovulación es el resultado de la influencia de los estrógenos.
Funciones y características del moco clara de huevo
Durante todo el ciclo, el moco cervical realiza una función protectora, impidiendo mecánicamente la penetración de agentes infecciosos en la cavidad uterina. Antes y durante la ovulación el moco cervical realiza otra función importante, la creación de condiciones favorables para que el óvulo pueda reunirse con el espermatozoide.
Su consistencia suave y fluida contribuye a este encuentro, ya que las células sexuales masculinas pueden viajar fácilmente a través de él. Además, las células de esperma aparecen en el cuello uterino unos días antes de la ovulación y las sustancias nutritivas, que están contenidas en el moco, las ayudarán a sobrevivir hasta la liberación del óvulo desde el folículo. Sin embargo, el moco cervical no sólo ayuda a los espermatozoides a llegar al destino, sino que también crea un soporte contra de su penetración en la cavidad cervical. Esto se refiere a los espermatozoides débiles, que no pueden superar el flujo transversal de flujo cervical. Por lo tanto, la selección natural primaria se realiza en un nivel celular.
La presencia de muy poco fluido cervical durante la ovulación o la modificación de su contenido pueden constituir el factor cervical de la infertilidad. Estas son algunas de las patologías relacionadas con este fenómeno:
Incompatibilidad inmunológica: este es el caso cuando se detectan anticuerpos anti-esperma en el moco cervical.
Estenosis cervical (como consecuencia de cambios cicatriciales del cuello uterino o adherencias después de una intervención quirúrgica, incluyendo el aborto): la descarga cervical no se produce en cantidad suficiente debido a la afección de las glándulas mucosas.
Diabetes mellitus: la composición bioquímica del moco no se ajusta a las normas.
Predecir la ovulación de acuerdo con el moco cervical
Las etapas en la producción de moco cervical pueden ser monitoreadas incluso en casa, al mantener un libro de registro especial. Es necesario registrar consecutivamente los días de la menstruación (marcándolas con la letra “M”), los días secos (“S”), el moco no transparente y grueso (“N”), la descarga vaginal cremosa (“C”), seguido por el moco fluido (“F”), el moco tipo clara de huevo (“H”) y por último, moco grueso y blanco influenciado por la progesterona (“B”).
Es necesario abstenerse de las relaciones sexuales durante el primer mes de registro. Períodos como el “C”, “F” y “H” son más favorables para concebir, ya que el pico de descarga vaginal profusa normalmente prefigura la ovulación. Este método tiene solamente un 70% de precisión, por lo tanto, no puede ser el único método de control utilizado. Las pruebas clínicas para predecir la ovulación son:
La detección del síntoma “pupilo”
Pruebas de estiramiento
La prueba “fronda”
La exploración ginecológica del cuello uterino puede revelar la presencia de una importante expansión de la boca cervical externa debido a la descarga masiva del moco cervical de ovulación. Este fenómeno se conoce como síntoma “pupilo”.
La segunda prueba puede ser realizada por un médico o por la propia paciente en casa. Para ello, es necesario utilizar un dedo limpio para sacar de la vagina una pequeña cantidad de moco, colocarlo en la palma de la otra mano y estirarlo como si se quisiera formar un “hilo de moco”. Su longitud puede alcanzar hasta 12 cm durante la ovulación, mientras que en otros días del ciclo este hilo de moco se rompe incluso entre dos dedos entreabiertos.
La imagen de “fronda” se puede observar si el moco, que se ha secado sobre un portaobjetos de vidrio, se examina bajo el microscopio. Este efecto se asocia con un alto contenido de ácido en la descarga de estrógenos. El moco influenciado por la progesterona cristaliza fragmentariamente y por lo tanto, no crea una imagen.
Los síntomas de la ovulación no relacionados con el moco cervical
Los siguientes fenómenos pueden indicar la salida del óvulo desde el folículo:
Sangrado de ovulación: ligeras manchas en medio del ciclo
Hormigueo, dolor abdominal no tan intenso causado por la ovulación
Índice pico en el diagrama de temperatura corporal basal
Resultado positivo de un test especial disponible en farmacias
Por lo tanto, es posible rastrear la ovulación, haciendo un seguimiento del moco cervical, así como a través de otros métodos. Es importante tener en cuenta que la perturbación de las fases de la producción de moco cervical antes y después de la ovulación, así como los cambios en su coloración, olor y consistencia indican la presencia de una patología. Estos síntomas requieren un diagnóstico clínico.