Siempre estamos a tiempo de ayudar a mejorar nuestra visión y/o prevenir problemas visuales. ¿De qué manera?
Veamos:
No fumar. Los fumadores tienen más riesgo de degeneración macular, cataratas y daños en el nervio óptico.
Usar gafas de sol homologadas, que bloqueen del 99 al 100 por ciento de las radiaciones UV y rayos infrarrojos.
De ser necesario, utilizar gafas graduadas que tengan la graduación indicada por el oftalmólogo, tras el chequeo correspondiente.
Lavar las lentillas de contacto adecuadamente.
Alimentarse a diario con los nutrientes necesarios, sin excesos aunque sin carencias.
Utilizar protección ocular cuando se practican deportes como esquí en la nieve, esquí acuático, natación, buceo, lucha, ciclismo, motonáutica.
Leer con la iluminación adecuada y hacer pausas regulares cuando se lee durante varias horas.
Mirar televisión desde al menos unos dos metros de distancia. La pantalla del televisor conviene que esté ubicada al frente y a la altura de la vista.
Establecer pautas de descanso cuando se permanece muchas horas frente a la pantalla de la computadora.
No utilizar colirios sin prescripción médica, aunque sean de venta libre.
No utilizar gafas graduadas si no han sido recetadas por un oftalmólogo.
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Fuente: este post proviene de Yoga-Bienestar, donde puedes consultar el contenido original.
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