La verdad es que llevo planteándome dejar de fumar varios años. Supongo que como a la mayoría de fumadores, el 31 de diciembre nos hacemos mil promesas a nosotros mismos y mil propósitos nuevos, entre los que se encuentra dejar de fumar
Durante días, semanas o meses, a lo largo de varios años, me he sentido frustrada por no haberlo conseguido, pero luego se me pasaba, justificándome en el sentido de que físicamente yo me encontraba perfectamente y como decía Sara Montiel, "Fumar es un placer".
La realidad es que para mi, sigue siendo un placer y la única justificación que encuentro para dejar de fumar, son los resultados científicos que todos los días nos demuestran los sanitarios. Físicamente yo me encuentro muy bien y no he notado ningún síntoma que me obligue a dejar este "vicio" tan rico, máxime cuando pienso que en la época en la que yo empecé a fumar nadie nos advirtió de su peligro. Era muy chic que una chica fumase. Los chicos nos veían como muy modernas y eso nos gustaba y los sanitarios, médicos, etc. fumaban como carreteros en sus consultas médicas e incluso en los hospitales. Pienso yo, que con qué moral te podían decir a ti, "no fume", cuando ellos lo hacían en tus propias narices. Yo creo que se tardó mucho en saber las consecuencias de este hábito que nos metían hasta en la sopa. Acordaros de los anuncios de Mallboro: El machote subido a caballo fumando, porque eso era muy varonil. En fin, como siempre somos el conejillo de indias de todos los productos que se sacan al mercado. Cuando ya no hay remedio, te dicen que tal cosa no es buena. Sobre ésto habría mucho que hablar, pero no quiero irme por los Cerros de Úbeda. Quizás mas adelante.
La verdad es que yo ya tengo mis añitos y un hábito de 30 años, cuesta mucho quitárselo. Mi mayor preocupación, fijaros que tontería, es el engordar, porque con mis años, mis kilos y mi vida mas o menos sedentaria, lo que me faltaba es ponerme como un barril.
.
He estado informándome y el engorde es real y científico. No está basado en la ansiedad en la que te pones ciega comiendo para suplir el hábito, pero eso ya os lo contaré mañana.