El codo de tenista o epicondilitis consiste en una inflamación en las fases agudas y un déficit de riego sanguíneo en las fases más crónicas, en la zona donde los tendones de las músculos epicóndilos se insertan el hueso epicóndilo. El paciente notará un dolor intenso al palpar el epicóndilo que se encuentra en la zona externa del codo. Suele ser frecuente en personas que realizar trabajos físicos muy repetitivos con el brazo. Sin embargo, encontramos que muchos pacientes no tienen ningún tipo de trabajo intenso ni repetitivo y sin embargo, padecen una epicondilitis o codo de tenista de forma crónica donde el tratamiento médico a base de antiinflamatorios e incluso, infiltraciones de cortisona o corticoides ha fracasado, también suele fracasar los tratamientos de fisioterapia a base de ultrasonidos o medidas puramente locales. Con frecuencia en estos casos el problema en realidad está a nivel cervical, que está expresando o exteriorizando un problema de estrés o conflicto emocional que implica crispación y enfado. En estos casos además de dolor en el epicóndilo suele aparecer irradiación dolorosa hacia la muñeca y hacia la mano, puntos gatillo en los músculos del epicóndilo, dolor cervical incluso a veces cefaleas y mareos. En este caso, es necesario tratar como el estrés esta repercutiendo en la zona cervical y posteriormente, hacia el codo; con lo cual, es necesario tratar el Sistema Nervioso y especialmente la vesícula biliar con un tratamiento de plantas medicinales para regular estas alteraciones, también es muy importante que el paciente sea consciente de qué situación de estrés o crispación le está provocando está situación.
Roberto Junquera Landeta